Realmente estaba perpleja ante lo que veía... Delante de mis ojos había una multitud de personas inmensa y una gran variedad de autos deportivos en lo que parecía ser una vieja fabrica abandonada, la música envolvía el lugar y sólo la opacaba los gritos y bullicios de las personas presentes. A lo lejos logro divisar a Jimin que estaba sentado en el capó de su auto rodeado de chicas y conversando con unos chicos que no eran precisamente los de siempre, logro reaccionar cuando de algún lado del lugar se escucha una fuerte voz proveniente de un megáfono.

-Y por fin lo que todos esperaban, después de un tiempo tenemos de vuelta en nuestra pista a dos grandes competidores, muchos los conocéis como Jimin y Suga, yo los conozco como los Reyes de la pista. -La gente enloqueció. -Esta noche competirán como rivales.

Ambos autos se alinearon en la calle y cuando se escuchó el sonido de un disparo salieron disparados dejando sólo humo en su lugar. La gente mira atenta la calle esperando con ansias el regreso de los autos que determinaria a un ganador, después de algunos minutos se logra ver el Porsche 911 de Jimin seguido por el lamborghini Gallardo de Suga, Jimin pasa la línea de salida posicionandolo como el ganador. La gente enloquecida por la victoria rodea el auto de Jimin y comienzan a celebrar dandoles pequeños golpes al capó y lanzándosele encima a Jimin, al salir del auto nuestros ojos se encuentran y la sonrisa que portaba se desvaneció en un instante como si nunca la hubiese tenido...

Suga que estaba tras de el se gira curioso para ver lo que los ojos de Jimin veían con tanto detenimiento y al verme tuvo la misma reacción que Jimin segundos atras. Ambos se acercan a paso rápido hasta donde yo me encontraba sin quitarme los ojos de encima, como si estubieran estudiando mi reacción ante todo esto.

-Amanda. -Comienza Jimin intentando parecer natural. -¿Qué haces aquí?. -Me da una sonrisa nerviosa que mas bien pareció una mueca.

-Podemos explicartelo... -Mira a Jimin como pidiéndole ayuda. -¿Verdad Jimin?. -Preguntó mientras golpeaba con su codo las costillas de Jimin y sonreía nerviosamente.

-Si... -Sonrió sobandose las costillas. -Claro que podemos.

El hecho de que no quitaran esas sonrisas de sus caras me ponía peor, es increible como hasta después de pillarlos me siguen ocultando todo.

-¿Qué me vais a explicar?. -Moví mi mano derecha alrededor. -Creo que este lugar habla por sí solo. -Hice una pausa mientras observaba todo con mas detenimiento. -Alcohol, fiestas, autos, ¡CARRERAS ILEGALES!. -Recalco las ultimas palabras con énfasis. -Realmente no se si quiero que me expliqueis nada.

-No te dijimos nada porque no queríamos que te introdujeras en este mundo de mierda.

-¡No me dijisteis nada porque no confiabais en mi!. -Estoy tan enojada que en vez de hablar estoy gritando.

-¡Eso no es verdad y lo sabes!. -Ahora es Suga el que grita.

Las personas de nuestro alrededor empiezan a notar la situación y a mirarnos con curiosidad pero no me importa.

¡En estos momentos no me importa nada!.

Lo señalo. -Tu callate. -Le digo entre dientes. -De los dos realmente tú fuiste el que más me desepcionaste. -Mi voz se rompe dando paso al llanto. Lágrimas de ira, rabia e impotencia. -Tantas veces te pedí que me contaras la verdad, que me dijeras que pasaba... Pero preferiste ocultarme todo. Estoy muy dolida por todo esto, ambos son unos mentirosos.

-Amanda... -Jimin iba a hablar pero lo interrumpí.

-Y tu cállate también. -Me quité las lagrimas de un manotaso. -A ti igual te pregunté que pasaba, te pedí que me dijeras y en su lugar me ignoraste y preferiste mentirme, tratarme mal y ocultarme todo. ¡Y se supone que seré tu esposa!. -Dejo de mirarlos y fijo mi vista en los chicos que habían llegado hace un rato y se posicionaron detras de Suga y Jimin mezclandose con el tumulto. -Y ustedes... -Inquiero mientras los señalo uno a uno con el dedo índice. -No quiero que me volváis a dirigir la palabra. Tanto que se hacían llamar mis amigos y lo único que hicieron fue mentirme. -En cada palabra que salía de mi boca se podía sentir la rabia, el desprecio, la traición y el dolor que sentía. Y lo gracioso de todo es que todas esas emociones negativas me las habían provocado los que se suponían que eran mis amigos.

Ya me cansé, todos sabían y nadie me dijo... Me siento traicionada por todos. ¡Desde que llegué todo a sido una mentira!.

Obviamente no pretendía que nada más conocerme me dijeran todo, pero ya tenemos un tiempo de amistad y joder, Jimin, se suponía que voy a ser su esposa, forzados o no, nos vamos a casar; lo menos que merecía era conocer en las cosas que estaba metido mi futuro esposo.

-Amanda yo... -Tae iba a hablar pero fue interrumpido por Mark.

<Genial, el que faltaba.>

-Vaya, vaya. -Se pasea a mi alrededor. -Viniste...

-¿Tu fuiste quién le contaste?. -Jimin se veía tan enojado que daba miedo.

-Amanda alejate de el. -Me ordena Suga.

<¿¡Todavía se atreve a ordenarme lo que tengo que hacer después de lo que me hizo!?>

-Prefiero estar con el que con mentirosos como vosotros. -Mark sonrié abiertamente. La situación se le estaba haciendo muy divertida.

Por mi parte cada palabra que decía destilaba veneno puro. Toda la ira y frustración que sentía en esos momentos lo transformaba en palabras que lastimaban como dagas. Si yo me siento así por culpa de ellos, pues ellos se sentirán de la misma forma por mi culpa.

-Amanda, no sabes lo que estas haciendo. -Me advierte V.

<Lo que me faltaba, ahora V también quiere jugar a hacerse el bueno.>

-Te equivocas, nunca he tenido mis ideas más claras. -Y sin más me fuí de ahí con Mark...