-¿Amanda, me estas escuchando?. -Preguntó sacándome de mi trance.

-Ohh. -Me sorprendí, ni siquiera noté cuando llegó. -Suga, perdón, estaba pensando y no me di cuenta que me estabas hablando. -Hace una mueca de desaprobación en respuesta. -¿Qué me decías?.

-Ultimamente estas muy distraida. -Me reclama. -Te estaba preguntando que qué te pasaba, las primeras clases te las pasaste muy callada y has estado totalmente inmersa en tu mundo en la cafetería ignorando cuando los chicos hablaban contigo... ¿Estás bien?. -Esta vez deja su tono acusatorio y da paso a uno preocupado.

-Si, estoy bien, no te preocupes. -Miento descaradamente.

La verdad es que no quiero preocuparlo y, en parte, si estoy así es por su culpa, si tan solo me diera las respuestas que necesito no me encontrara en esta situación.

-¿¡Por qué me mientes!?. -<Y ahí esta ese estúpido tono de nuevo>. -Se que no estás bien... -Continúa a la par que da unos pasos mas a mi. -No hay que conocerte de toda una vida, ni andar contigo para darse cuenta que algo te ocurre. -Pone su mano en mi hombro y achina los ojos <Valga la redundancia> -¿Qué te pasó después de la fiesta que no me estas contando?.

Verlo tan preocupado por mi me rompe el corazón, y es por eso que no puedo contarle mi plan, se preocuparía aún más...

-Suga... -Retiro su mano de mi hombro. -En serio, no me pasa nada. Cambiemos de tema, ¿si?.

-Vaya... -Exclama con una mirada mezclada entre la decepción y la desaprobación. -Y yo que pensaba que éramos amigos y que confiabas en mi, ahora me doy cuenta que estaba equivocado... -Da media vuelta con intención de irse, su voz salía quebrada y se podía sentir un poco de molestia en sus palabras.

El tono que usó me dolió en lo mas profundo... Joder, es mi mejor amigo, el único que me ha dado razones suficientes para confiar en el <Pero al parecer no confía tanto en ti cuando no te cuenta nada>.

Joder, no se que hacer, ¿realmente mis ansias de descubrir lo que pasa, a pesar de que puede ser algo muy estúpido, valen más que mi amistad con Suga?. -No paro de cuestionarme eso. -Pero luego está la otra parte... La otra que me dice que si el me considerara su amiga me dijera que está pasando y, justo ahí, es donde me digo que ya estoy demasiado decidida como para dar marcha atrás.

Ahora sólo me queda tratar de salvar mi amistad, por lo menos hasta que descubra que está pasando, para no perder del todo al chico que se ha ganado en tan poco tiempo un lugar en mi corazón.

-Suga... -Lo agarro de la muñeca y lo giro hasta quedar frente a mi nuevamente. -No te pongas así, ¿si?. Te necesito, no me dejes sola.

<No me hagas lo mismo que me hizo Jimin una vez, de ti no podría soportarlo>.

-Yo no pensaba hacerlo, ¡quiero ayudarte!, pero eres tú la que no me estás contando que es lo que te pasa.

<Venga se fuerte, no se lo puedes decir, si lo haces arruinará tus planes>.

-Es que no estoy segura de si debo decirte o no...

-Entonces si hay algo. ¡Lo sabía!

<Ya la cagué>.

-No es que no confíe en ti, al contrario, pero como mismo tu tienes tus secretos yo tengo los míos. -Le explico con suavidad, no quiero que piense que le estoy diciendo esto en venganza. -Por favor, entiendeme.

No puedo decírselo, el no me entendería, solo seguiría ocultandome la verdad al igual que todos.

-Ok, te entiendo, supongo que en cuanto te sientas cómoda con lo que sea que te pase me lo dirás... -Posa su vista sobre mis ojos y estudia mi expresión. Después de unos cortos pero intensos segundos se dispone a hablar nuevamente. -Bueno, ahora si me voy que tengo clase.

-¡Suga!. -Lo tomo nuevamente de la mano para que se detenga. -¿Puedo hacerte una pregunta?.

<No puedo creer que vaya a hacer esto>

-Claro.

Solo quiero que me lo cuente el antes de yo averiguarlo por mis propios medios, tengo fé en la confianza que nos tenemos... Solo necesita la oportunidad para decírmelo.

-¿A dónde fuisteis ese día que Jimin los llamó a las diez y media de la noche?.

Y, como era de esperarse, no obtuve respuesta por su parte además de un incómodo silencio.

<Sabía que no te diría nada, el no confía en ti.> Quería creer que el era diferente, y que valoraba mas nuestra amistad... Ya veo que yo también me equivoqué.

-Supongo que tu tampoco me vas a decir... -Mi tono de voz salió mas severo de lo que quería.

Estoy enojada, pero mas que eso estoy dolida... Muy dolida.

¿Cómo tiene el descaro de reclamarme el hecho de que yo no confíe en el cuando está claro que el tampoco confía en mi?.

-Lo siento, Ami, pero eso es algo que no me toca decirte...

-Si, claro. -Sonrío sin ganas. -Supongo que ahora me dirás que le pregunte a Jimin, ¿no?.

-Si, tienes razón. Esas son cosas que sólo él te puede decir.

-Siempre me dices lo mismo, pero Jimin no da respuesta a ninguna de las preguntas que le hago, ¡y tu sólo me dices que le pregunte a el!. -Exploto. -¿¡Acaso sabes lo frustrada que me siento al no saber nada de lo que está pasando!? Y que ustedes, que se hacen llamar mis amigos, en especial tu y Jimin, me lo oculten todo!?. -Concluyo prácticamente en gritos.

-¡Lo siento!. -Me responde sumándose también a los gritos. Algo sumamente extraño en el quien siempre mantiene una actitud perezosa y despreocupada. -Eso no depende de mi.

-Ok, ¿sabes qué?, si ustedes no contestarán mis preguntas yo buscaré las respuestas por mi cuenta. -Revelo esta vez sin importarme mi confesión.

-¿A qué te refieres con eso?. -Su tono de molestia pasó a uno de confusión. -Amanda, no hagas ninguna tonteria. -Y ahora a uno alarmado.

-Saca tus propias conclusiónes. -Concluyo a la par que me levanto de la silla en la que estaba sentada y me voy.

<No me cuentes, yo tampoco lo haré. Ahora ya estamos a mano.>