🌳Capítulo 4.🌳
(Editado)

-No sabes cuantas ganas tengo de asesinarte.

Me plante frente a él mirándolo fijamente a los ojos, por la expresión de su cara, parecía que tuviese a su peor pesadilla frente a frente.

-Si, soy yo.

Él se levantó de la acera confundido, balbuceando entre dientes. Era al menos una cabeza más alto que yo, pero no me intimidaba, se notaba que estaba vulnerable.

-No soy un fantasma, aun no.

"Pero puede que tu lo seas pronto" gritó mi subconsciente con furia dentro de mi.

-¿Cómo es que..? - retomó su compostura y preguntó - ¿Qué haces aquí?

-Karma, venganza, destino, llámalo como quieras - dije cruzando mis brazos sobre el pecho - algo me trajo aquí y no voy a desaprovechar la oportunidad...

-Estas loca - me interrumpió con un deje burlón y arrugado la frente - ¿Cómo diablos me encontraste? ¿Acaso estás acosándome?

-Puede este loca, puede que esté tan loca que te haya acosado toda la noche mientras dormías - continúe con sarcasmo, un sarcasmo que él no notó.

-¿Qué pu...

-Era sarcasmo, no soy una acosadora - ¿enserio tuve que explicárselo?

-No te creo una sola palabra.

-No me importa.

-Bien, voy a fingir que solo estas aquí por casualidad.

-Es la verdad.

-Aja - agrego alargando la palabra.

Yo gire los ojos.

-Sobre lo de ayer - alzó los hombros - no buscaba matarte, enserio, fue solo un pequeño accidente y ya - dijo con tanto desinterés que despertó una ira gigantesca dentro de mi.

-¿Un pequeño accidente? ¿Un maldito y pequeño accidente? Pues, tu pequeño accidente casi me mata - le grité en la cara sorprendiendonos a los dos.

-Perdón ¿Si? - respondío sin rastro de arrepentimiento.

_No tuviste ni la puta decencia de quedarte a ver como estaba, a preguntar por lo menos si estaba viva.

-Ya te dije lo que querías escuchar ¿No? ¿Qué más quieres entonces? 

Quiero humillarte a ti y a tu estúpido ego, voy a rebajarlos a los dos a mis pies...

-Además, se notó en tu cara que me odiaste desde que me viste.

Eso debe ayudar, sonó es tupido, pero servirá.

-¿Qué te odié? ¿Eso qué tiene que ver con esto? ¿Qué novela traes en la cabeza? -  funcionó, la bestia se esta enfureciendo.

-No solo conmigo, se notaba que odiabas a todo el mundo, andabas con esa expresión de "Oh, miren todos, soy el chico malo, el cliché más prostituido de todos y me importa una mierda el mundo".

-¿Por qué te importa tanto? ¡No me conoces! - afirmó alzando la voz - yo no hubiese podido hacer nada por ti ayer.

Pensaba contestar, pero entonces, él empiezó a gritar de verdad.

-¿Para que querías que un completo extraño que cometió la equivocación de darte una maldita tostada con canela estuviese contigo cuando sabes perfectamente que ese tipo no hubiese podido hacer una mierda por ti?

_Por qué no hay nadie más, eres el único culpable de todo, porque después de mucho tiempo al fin puedo gritarle a alguien sin remordimiento y con una razón medio justificada, porque ahora puedo desahogarme con alguien, y estoy arta de guardarme todo para mi misma.

Para este punto, ya no estaba hablando de lo que pasó ayer.

Él tiene razón, es cierto, él no tenía por qué quedarse conmigo, él es un extraño que tuvo un mal día, no estaba de humor para atender a nadie, todos hemos tenido esos días en los que odiamos a toda criatura que se mueva. Se equivocó en una orden, es todo, la misma Cheryl me dijo que se había encargado de mandarlo a casa, de castigarlo.

Él no hubiese podido estar ahí con la tipa desconocida a la que casi mata por error; sin importar si quería o no hacerlo...

Pero no quiero, no quiero perdonarlo porque esto me ayuda, me ayuda a sentirme libre, a desahogarme con una razón aparentemente "justificada".

Esto pone todo mi odio en un solo blanco y yo solo tengo que disparar.

Soy egoísta, lo sé, porque lo quiero ahí, lo quiero para pelar conmigo, para distraerme... en vez de superarlo, quiero convertirlo en mi saco de boxeo.

-Golpéame...

Esa no me la esperaba.

-¿Qué?

-Necesitas desahogarte, haz lo que te nazca conmigo - explicó con un gesto de vulnerabilidad, alzando sus manos a lado y lado - hazlo, terminemos esto de una buena vez. solo dame una bofetada y vete.

-Que fácil fue - él solo ignoró mis palabras sin saber realmente lo que significaban.

-¿Acaso necesitas más razones para hacerlo? Porque puedo darte muchas - afirmó con cara de orgullo y arrogancia

Si sólo supiera que acaba de perder.

-Ya tengo suficientes ¿No lo crees?

-Entonces, ¿Qué esperas? - me provoco - Anda, liberame de tu estúpido rencor.

Lo miré una última, ahora yo tenía la cara de arrogancia y el orgullo, y él aun no entendía por qué.

-No me voy a rebajar - sonreí - tuve suficiente por hoy, caíste a mis pies, me diste lo que queria y lo convertiste todo en un divertido juego.

Ya no me importa lo de la canela, solo quería esto.

Y lo conseguí.

-Oh, querido cliché, ya te humillaste ante mi.

-¿Qué demonios? ¿De qué hablas?

Me di media vuelta y empecé a caminar con la frente en alto, unos pasos más adelante lo oí gritar.

-Esto no se ha acabado, lo juro.

Ni siquiera me molesté en voltear, solo le saque mi dedo corazón y seguí caminando por las frías calles de Hill Valley, en pijama y con una victoria subida a la cabeza.

Este pueblo está sacando una faceta de mi que ni yo misma conocía, una faceta que me hace sentir poderosa, humillar a ese tipo me hizo sentir mejor de lo que había estado en mucho tiempo y escucharlo decir que esto no se ha acabado, solo hace que quiera seguir jugando...