Pov Yeonjun
Extrañaba a mi hermana pero decían que ya era hora de olvidarla, ya que ella no iba a regresar pero aún así quería estar con ella, aunque sea quería oír su voz.
Solo quería verla de nuevo, todo parecía un drama, mi madre estaba todo el tiempo nerviosa y no dejaba de poner carteles por todo el vecindario.
Por las noches recorría el vecindario para arrancarlos de los postes de luz, nadie debía enterse de los problemas que teníamos, mi mente me decía que ella iba a volver a casa con vida.
Escuche que Huningkai hacia brujería para jugar con Beomgyu, se decia que con solo una pócima logro cambiar algo de Beomgyu, no entendía que fue lo que hizo pero no creía en esas cosas. De alguna forma llamaba mi atención y estaba seguro que si hablaba con él de seguro podría descubrir donde estaba mi hermana.
El problema es que es muy orgulloso y no parecía agradarle, nunca supe cuál era su problema .
En ese momento cuando me dirijo a la cocina para sonarme los mocos, lo vi a Huningkai que se dirigía al cuarto de Beomgyu, estaba vestido de pirata, se notaba nervioso al caminar volteaba para todos a los pocos segundos como si estuviera ocultando algo, lo seguí lentamente.
—¿ Que haces así vestido?— le pregunté cuando agarro la manija del picaporte, se dio vuelta enojado en su bolsillo llevaba una jeringa con un líquido verde—¿ Que tienes ahí?—
— ¿Siempre te metes en lugares que no debías preguntar, Yeonjun?—me dijo malumorado, antes de que pudiera responder su pregunta, entro a la habitación y me cerró la puerta en la cara, me quede fijamente mirando la puerta.
Minutos más tarde escuché gritar a Beomgyu.
—¡Pero no quiero !—grito Beomgyu, se lo escuchaba que estaba llorando, intente abrir la puerta para salvarlo pero estaba cerrada con llave.
Asustado ante esa situación, empeze a darle patadas a la puerta para que se abriera y luego la golpie con mis manos, algo malo le estaba pasando al pequeño Beomgyu.
—¡ABRE LA PUERTA DE UNA VEZ !—grite desesperado y seguia pegandole patadas, estaba desesperado, seguía llorando Beomgyu—¡SUELTALO!—
La unica persona que podia llegar a lograr algo era Soobin, lo busque por todo el palacio hasta que lo encontre estaba en la cama leyendo un libro titulado como " a todos los chicos que me enamore" tenia puesto una remera gris y unos pantalones negros.
—Permiso—dije intentando no molestarlo, odiaba que habláramos en voz alta cuando estaba leyendo un libro, estaba tirado en la cama leyendo un libro, se veía adorable
—Ven a ayudarme—me invito Soobin—Quiero recrear con vos una escena del libro— me propuso
—Pues... No soy actor—dije nervioso, ni siquiera se porque dije eso sí en realidad me gustaba actuar, solo que me ponía nervioso.
Me acerque un poco más y me senté en la punta de la cama , mirando el suelo. Soobin me abrazo muy fuerte por detrás y me dijo
—Vamos, juega conmigo, será divertido—
—No se cómo hacerlo—dije mirándolo a los ojos y enseguida hizo una sonrisa
—Si que sabes, no mientas—dijo con una risa malvada
Kai y Beomgyu aparecieron de la nada ellos llevan cuernos de venado en su cabeza y sus ojos eran de colores verdes y azules.
Soobin me tiro al suelo y con un lazo Kai me atrapó las manos.
—¿Que les ocurre?—dije asustado
—Tu juicio final ha llegado—dijo Soobin y Beomgyu me arrastró atado por el suelo, llevándome a quien sabe dónde, grite.
Desperté y todo había sido un horrible sueño, sudaba por todos lados, mamá corrió para la habitación y me abrazo preocupada. Le conté sobre mi sueño y volvió a abrazarme.
Esa noche dormí en su cama, ya que a su lado me sentía seguro. Me costó volver a dormirme había muchas cosas en mi mente que no dejaban de pasar por mi cabeza pero intentaba relajarme.
Abro los ojos al día siguiente y agarro mi celular en eso veo llamadas perdidas de un desconocido, me preguntó quién sera.
Me decido en llamarlo y me contesta hablaba alguien enojado.
—¿Quién es usted?— pregunté sin comprender lo que pasaba
—Soy Mark, el director de tu vídeo, apúrate en venir porque no te iremos a buscar—me grito del otro lado y cuando estaba por contestarle pero la llamada ya había finalizando
—¿Soy un Idol?— me pregunte a mi mismo y enseguida comenzé a reírme solo y llorar por fin después de 5 años lo logré, ya no más trabajos de mierda
Un mensaje me distrajo de mis pensamientos y era Mark enviándome su ubicación,me pidió que no llegara tarde y que me vistiera de todo blanco con zapatos negros.
—Otra vez tenía que vestirme de blanco como un heladero, dios porque me mandas a hacer estás cosas Big Hit—me queje
Salí de la casa para tomar el colectivo que me dejaba cerca de la oficina y sobre la ropa me puse mi campera universitaria blanca y negra, la parte negra estaba hecha de cuero ecológico.
Recuerdo que mamá siempre me regañaba por gastarme el dinero en ropa.
Subi al colectivo y al pasarla varias veces no tenía saldo.
—Niño, paga de una vez—dijo el chófer enojado
—Resulta que no tengo saldó—dije dando lástima abrió sus puertas y me pidió que me bajará
Maldije al colectivero y una señora paso por al lado mío y me dijo:
—Esta juventud que cada día es más maleducada—
—¡Que se mete vieja puta!—le grite y ella empezó a caminar más rápido
Odiaba la gente que me decía que tan educado tenía que ser, a veces actuaba como un loco como la vez que lo seguí a Soobin corriendo por alguna razón algo me decía que debía perseguirlo, solo quería ser su amigo.
Llegué a la entrada de la empresa Big Hit y veo a dos chicos rubios de edad muy temprana fumando un cigarro, lo tira bruscamente uno de ellos y me dice:
—pronto caerás de tu cuna de niño rico—
No quería problemas con ese coreano de pelo rubio
—¿ Que te pasa?— le dije empujándolo para que me soltara
—hey, no empujes a mi amigo—dijo el otro rubio que parecía tener unos 14 años, se acercó a mi para pelear y entre al lugar, lo más rápido posible.
De afuera me gritaron gallina pero los ignore, necesitaba la plata porque mamá estaba muy mal y no quería salir de casa, estaba traumada con lo de mi hermana.
Llegué a la oficina de Mark, quién me felicitó sarcásticamente por llegar "temprano".
—Me gusta tu look pero debes usar las zapatillas Vans, tenemos un contrato con ellos—anuncio Mark, su nombre me sonaba a marketing pero era pura casualidad
—No me gusta Vans—me queje, siempre fue un calzado incómodo que me lastimaba el talón de Aquiles
—Que me importa a mí Yeonjun, te las pones igual, por favor completa el formulario—dijo Mark entregándome unos papeles.
Esos papeles me indican lo siguiente:
En el día de hoy 9/2/19, el señor Choi Yeonjun firmara parte de la empresa Big Hit, quienes se comprometen a que esté nuevo grupo llamado Tomorrow x Together, sea un éxito en la industria musical y el empleado Choi Yeonjun se compromete a dar lo mejor dentro de la empresa, sin ocacionar escándalos dentro de ella.
al firmarlo vi que tenía que cumplir con las reglas de la empresa, las leí para mí mismo y lo firme, me gustaba el salario que me ofrecia porque pensaba comprarle una mejor casa a mamá, quería brindarle todas las cosas que no puedo hacer mi padre, ya que él se encargo de abandonarnos.
Fuimos a un fan café y el productor dijo:
—Elije una computadora y juega a lo que te guste—
Elegí una computadora y me puse a dar vueltas con la silla mientras disfrutaba un vaso de Coca-Cola, mientras esperaba a que se cargará el Outlast, amaba los juegos de Terror. Me puse a insultar y maldecir a todos los de juego, mismo golpeaba la pc cuando perdía y cuando gane el juego, me puse a deslizarme por todo el lugar.
Jugue al Lol y me trajeron ramen para que comiera durante la partida, nunca me sentí tan feliz ni mi madre hacia estás cosas.
—¿Te diviertes?—pregunto Mark
—Me siento hiperactivo—exclame
—Sigueme iremos a la sala de videos juegos—meciono y lo seguí
En cuanto llegamos corrí hacia la máquina de peluches y saqué un osito blanco con una remera roja, luego me metieron en la máquina de peluches y me puse a jugar con ellos, yo quería jugar y hacer que tenían sexo los peluchitos pero no me dejaron.
Por último fuimos a la sala de karaoke y me puse a cantar una canción con mi osito había elegido la canción Run de bts, con eso finalizamos la grabación que jamás imaginé que iba a ser tan agradable.
De regreso tome el camino para ir a mi casa y al llegar la vi por la ventana, ella estaba llorando, me sentía mal al verla así y cuando voy a entrar escucho una voz.
-—Entiendo muy bien ese dolor pero puedo ayudarte—escuche una voz a lo lejos y mire para todos lados y había un chico de piel reluciente, su pelo era negro y tenía unos enormes ojos negro.
—¿Quién eres?—pregunte
—Sigueme y te daré lo que buscas— me propuso, dude en seguirlo porque no lo conocía —¿Quieres volver a verla? Te daré lo que necesitas—insistio
De igual forma lo seguí porque algo me decía que tenía eso que tanto quería.
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