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Capítulo 4 - Conversaciones

- ¿Te ocurre algo?

Li miró a la chica de reojo, - no es nada.

-Desde que regresaste anoche te veo algo pensativo, ¿ocurrió algo?, - preguntó Kasha con un poco de preocupación.

-Ya te lo dije, no es nada; - contestó Yunxiang parándose de su asiento y dirigiéndose a su motocicleta.

Estaban a las afueras de un pequeño edificio, uno de los pocos que había en Donghai, habían ido con la intensión de conseguir un par de cosas para el taller; sin embargo, al último momento no se sintió con ánimos para hacer algo.

- ¿A dónde irías?, - preguntó la joven con algo de curiosidad.

-A entrenar.

-¿Y dónde entrenas exactamente?, - interrogó Kasha, - nunca te he visto entrenar por aquí, y dudo que lo hagas en el trabajo.

-Eso es algo personal niña, - respondió el peli-negro.

- ¿Hasta cuando dejaras de decirme así?, - habló la chica con un tono un poco quejumbroso; - sólo eres un par de años más grande que yo, además de que ni siquiera eres mayor de edad.

- ¿Necesitas que te lleve de regreso?, - preguntó Li ignorando lo dicho mientras encendía la motocicleta.

- Puedo regresarme sola, - dijo Kasha parándose, - a donde sea que vayas a "entrenar", espero que no sea para... ¡verte a solas con la doctora Su!

-¡Por supuesto que no!, - negó Yunxiang, sin embargo, su amiga ya se había ido.

Bufó con molestia, desde el día de ayer había estado muy distraído, ¿y cómo no estarlo? Hace unos días atrás había vuelto a su vida más o menos tranquila, y ahora tenía que lidiar con el regreso de la familia De y... una versión diferente del detestable de Ao Bing, además de su otro yo, que por cierto no tenía ni idea de dónde estaba.

Suspiró frustrado, tal vez el entrenamiento relaje un poco su mente antes de que explote. No perdió más tiempo y se dirigió al lugar en donde siempre entrenaba...

-Hoy llegaste temprano, - dijo el enmascarado mirando al recién llegado, - en fin, no importa, así acabaremos más pronto.

Dicho esto, comenzó el entrenamiento de Lixiang, el día transcurrió normal, exceptuando el hecho de que el peli-negro estuvo distraído todo el tiempo.

-Hay días en los que disminuyes tu desempeño, pero hoy rompiste récord, estuviste terrible; - habló el Rey Mono.

Yunxiang se limpió el sudor de la frente, - no lo hice tan mal, estás exagerando.

-En días anteriores has aguantado mejor los combates, hoy ni siquiera tuve que hacer nada, tú te derrotaste solito.

Li desvió la mirada con una mezcla de molestia y pena, volvió a recordar lo que había pasado horas atrás...

«El enmascarado hizo un ademán con la mano para indicar que comenzara.

Yunxiang no esperó ni un segundo más y se lanzó a atacarlo directamente, sin embargo, el contrario lo esquivó fácilmente, volvió a lanzarle otro par de ataques sin tener éxito, y eso comenzaba a molestarle. No es como si en el pasado le haya acertado un golpe, pero en esta ocasión, parecía que el mono ni siquiera se esforzaba.

El mayor ladeó perezosamente la cabeza, -¿eso es todo?

El pelo-negro frunció un poco el ceño y se lanzó nuevamente, esta vez estaba seguro de que acertaría; sin embargo, el mono no hizo más que dar un paso hacia la izquierda, provocando que terminara cayéndose hasta el fondo en la fuente de agua.

Sobra decir que el trío de monitos estaban muertos de la risa.»

- No estás obligado a seguir, - habló el enmascarado interrumpiendo sus pensamientos.

Li alzó la vista para mirarlo, - ¿qué quieres decir?

-El acuerdo era enseñarte a controlar el fuego a cambio de mejorar mi motocicleta, -dijo el peli-blanco paseándose por el lugar; - yo ya tengo mis mejoras y tú ya controlas más o menos el fuego, si tu mal desempeño se debe a que ya estás harto de seguir entrenando, entonces –

- No es eso, es solo que... – Yunxiang hizo una pusa, - olvídalo.

- ¿Te quedaste sin trabajo?, ¿problemas familiares?

- Dije que lo olvidaras, - contestó el pelo-negro un poco brusco.

- Entonces deberías volver a tu casa niño, - dijo el enmascarado adentrándose en lo profundo del lugar, - ambos estamos perdiendo el tiempo.

- ¡Espera!

El peli-blanco se detuvo por unos instantes.

Lixiang bufó con cansancio, - en realidad, es sobre alguien, él es... mejor olvídalo, - habló resignandose mientras recogía sus cosas para irse.

- Está en las afueras de Donghai.

-¿Eh?

-Lo que oíste, si te das prisa tal vez lo alcances. - Finalizó el peli-blanco perdiéndose en las sombras del lugar.

El peli-negro no entendía muy bien lo que quiso decir, aún así, no perdía nada con ir; tomó su motocicleta y se dirigió hacia el lugar indicado.

Una vez que llegó se paseó un poco por el lugar, por alguna razón, tenía el leve presentimiento de que estaba en el lugar correcto.

-Joven Yunxiang, ¿qué te trae por aquí?

Li volteó rápidamente, tomándose con un par de ojos azules, eran fríos; pero a la vez... podía jurar que desprendían cierta calidez en sus orbes.

-¿Te sientes bien?, - preguntó el peli-azul algo confundido y preocupado.

- Sí, estoy bien, - contestó Yunxiang saliendo de su pequeño trance; - ¿qué haces aquí?

-Vigilo, -respondió Ao Bing con simpleza; - el portal que nos trajo aquí podría aparecer de nuevo.

-¿Seguro?

El peli-azul asintió levemente, - si las secuelas no aparecen dentro de un par de días, probablemente lo hagan dentro de unos meses o un par de años, aún así no me preocupa.

El peli-negro le dió una mirada algo curiosa; - ¿no te preocupa quedarte atrapado aquí?

- No hay razón para preocuparse, incluso si las secuelas no se presentan; mi maestro y el maestro Taiyi sabrán qué hacer.

- Ya veo, - dijo Li mirando más o menos discreto a los alrededores; - ¿y tu amigo?, creí que irías por él.

- Él está bien, está con mi otro yo.

Yunxiang lo miró minuciosamente, si hubiera estado comiendo, lo más seguro es que haya escupido todo; - deberías ir por él.

-¿Ocurre algo?

- Lo dejaste en el peor lugar posible...

Mientras tanto, en el palacio del Rey Dragón del Este, las cosas pintaban estar tranquilas, o al menos eso parecía por fuera.

- ¿Estás seguro de que toda la gente duerme en esas cosas?, no están mal, pero todavía se me hace extraña su forma; - admitió Nezha.

Ao Bing lo miró de reojo, la noche anterior había pensado en dejarlo dormir en una de las celdas del subterráneo, sin embargo, el mocoso se le adelantó y se durmió en uno de los sofás de la sala principal.

-No hablas mucho ¿cierto?

- No, - contestó el mayor cortante, pero luego de recordar sus motivos principales decidió agregar, - y dime, ¿cómo conociste a mí yo de tu dimensión?

-Lo conocí en la playa, estaba peleando contra un demonio y –

- ¿Alguna vez pelearon?

- Dos veces, - contestó el azabache, - la primera es la que te estaba contando antes de que me interrumpieras, cuando estaba peleando contra un demonio apareció Bing, y tuvimos un pequeño combate para ver quién rescataba primero a una niña.

El heredero de la familia De bufó levemente, eso se escuchaba algo ridículo; - ¿y la segunda?

- Fue cuando Bing quería sepultar a la aldea con un gran bloque de hielo.

El peli-rubio sonrió de lado, a eso había querido llegar; - ¿y lo hizo?

El menor negó, - no, lo detuve a tiempo.

- ¿Tuvo intenciones de matarte?

Nezha hizo una pequeña pausa, - sí.

- ¿Y trataste de matarlo?

- Por supuesto que no, ¿por qué lo haría?

- Por que él es tu enemigo, trató de aniquilar a tu preciada aldea y de paso acabar contigo.

- Bing sólo estaba confundido, - defendió el azabache.

El mayor rió con burla, - ¿y sólo lo perdonaste?

-¡Sí!

- ¿Porqué?

- Porque es mi único amigo, - contestó Nezha con seguridad en sus palabras.

El peli-rubio se quedó en silencio por unos momentos, las palabras del demonio hacían eco en su cabeza "mi único amigo".

-Buenas tardes mi señor.

Nezha se puso en guardia casi de inmediato, - ¿quién eres tú?

Ao Bing lo miró de reojo, - Yasha.

-Espero que no le moleste, necesito hablar con usted en privado, - habló el hombre del monóculo.

-¿Lo conoces?, - preguntó el azabache, la última ves que un viejo raro se metió a su casa sin avisar fue cuando el maestro de Bing entró a su cuarto.

- No te muevas de aquí, - dijo el peli-rubio con voz autoritaria mientras seguía a la mano derecha de su padre a un lugar lejano para que el demonio no oyera.

-No cuestionaré sus razones para traer a un crío aquí, - habló Yasha con la misma voz calmada de siempre. - Aunque... ahora que veo mejor al niño, le noto... un cierto parecido a alguien, ¿no será que-

- Sí, es él, - contestó Ao Bing sin rodeos.

- ¿Cómo es posible que Nezha haya –

- Es de otra dimensión, como resultado de un choque de energías en una pelea se abrió un portal que terminó dejándolo aquí, - habló el heredero de la familia De directo.

-Entiendo joven príncipe, - dijo el mayordomo, - no es necesario que me explique el resto, por lo que veo este Nezha todavía es un niño ingenuo, planea usarlo ¿no es así?

- Por obvias razones.

Yasha sonrió con malicia, - parece que ya no tengo nada que hacer aquí, le diré a su padre que-

-Esto es personal, - interrumpió el peli-rubio.

-¿Tampoco se lo dirá a su hermano?

- Se los diré cuando lo considere necesario, -contestó Ao Bing marchándose.

- ¿Es algún tipo de mayordomo o algo así?, -preguntó Nezha con las manos en los bolsillos.

-Si, es el mayordomo de la familia, - respondió el mayor observando minuciosamente al demonio, había algo que quería saber desde hace días, - ¿qué es esa marca en tu frente?

-Es la marca de la perla del demonio.

- ¿Perla?

- Sí, -contestó el azabache, - gracias a ella poseo todo mi poder, por así decirlo.

Ao Bing rió levemente con burla, - te vez tan ordinario como cualquier otro.

-No te burles, - se quejó el menor, - ¡que tú estás igual!

El heredero de la familia De sonrió de lado, - no sabes con quien estás tratando.

- Tú tampoco, no soy un cualquiera.

-Eso tendré que verlo.

Nezha sonrió de lado, de un momento a otro el collar que llevaba en su cuello se desprendió. 

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