-Bueno empecemos por el principio ¿te parece?- hablo Mafia muy relajado sin obtener respuesta del contrario - No te pongas nervioso, sólo vamos a charlar un poco, además te puede hacer daño ¿no?- le guiñó el ojo para después formar con sus dedos una "pistola" y apuntar al vientre de Geno.

El de bufanda en vez de relajarse ahora estaba muy nervioso y pálido.

-Creo que deberías dejar de jugar con eso aquí cari~- Lust acarició las manos de Mafia bajándolas.

El albino suspiro tratando de calmarse, pues podía sentir como el latir de su corazón movia todo su cuerpo.

-Ah... Siento espantarte- dijo sin preocupación.

-N-no i-importa- tartamudeo consiguiendo por fin recobrar la respiración.

-Bueno, no alarguemos más esto, ambos tenemos cosas que hacer ¿no?- tomó un cigarro y lo prendió, después le ofreció uno a Geno, quien se negó.

-Supongo...- observó que también Lust había empezado a fumar.

-Iré al grano. Nosotros tenemos una alianza con los Laboratorios Renrink, ¿si sabías no? Es una gran empresa familiar de farmacéuticos muy prestigiosa y reconocida por todo el país - hizo una pausa para sacar el humo del cigarro de forma lenta y desesperante, para el albino - ¿Pero de donde crees que consigue todas esas sustancias? ¿Por arte de magia? JA - de nuevo hizo otra pausa.

-Pensé que tenían distribuidores autorizados...- comentó Geno.

-Cosita- se burló Mafia- No hijo, eso es muy caro para que un particular pague todos los derechos que tienen las sustancias activas, además de que no quieren tener que rendir cuentas al gobierno y cosas que realmente no te interesan- rió para si y después tiro la ceniza del cigarro - el punto es que, querían negociar el experimentar con personas vivas... Especialmente niños- fue ahí cuando Mafia habló con un tono serio - Y no cualquier tipo de niños, querían que los orfanatos les proveyeran a esos niños, también a los de la calle o a niños especiales-

-...- El albino estaba impresionado, nunca creyó eso de la familia de su novio, y no sabía que decir.

-Nosotros estabamos en contra de eso, igual que Reaper- cuando escucho eso, Geno sintió un pequeño alivio - Sin embargo, muy de repente desapareció... Y sospechamos que fue su propia familia quien lo hizo desaparecer- 

-¡¿Qué?!- el de bufanda se sobresaltó levemente.

-Tu eres nuestra prueba de ello- de nuevo le señaló.

-¿Y-yo?- seguía sin comprender mucho.

-El simple hecho que no lo recuerdes es nuestra mayor prueba, pero te debió haber dicho algo ese amigo tuyo, Sans-

-¿Lo conoces?- preguntó sin pensarlo.

-Por una chica lo conozco, pero eso no es lo importante. Un día después de que Reaper desapareció, tu fuiste a su casa pero después de eso, tu también desapareciste hasta que te encontraron con varios golpes cerca de tu casa- terminó mirando fijamente al contrario.

El de bufanda no recordaba nada de eso, pero lo que le había dicho Sans y lo que le decia ahora Mafia era lo mismo.

¿Qué había pasado en la casa de Reaper...?

-¿Q-qué...?-  Un dolor punzante de pronto apareció, dejando a Geno inconsciente.