-Um lo conocí en el trabajo hace un par de días ...- Agarré mi teléfono de él, borré lo reciente y se lo devolví.

-¿Cómo sabes de Jason?- Le pregunté frunciendo el ceño, él se encogió de hombros y suspiró.

-Bueno, él vino mucho al hospital, porque su madre estaba enferma, tenía un tumor cerebral. Y bueno, las cosas no se veían bien para ella, murió hace un año. Le ayudé en eso, le dije que no era fácil perder a un padre.- Miré a Josh conmocionada.¡Vaya!, sé cómo se siente perder a un padre, perdí dos.

-Oh, Dios mío, eso apesta.- Le dije a Josh sacudiendo la cabeza mirando hacia abajo.

-Sí, era un niño dulce, no lo había visto desde entonces, estaba pensando en dejarle quedarse con nosotros a pesar de que era lo suficientemente mayor como para vivir solo, pero nunca tuve la oportunidad de preguntarle, él nunca apareció en el hospital.¿Por qué no sabía de esto?

-¿Por qué no me dijiste esto?- Pregunté cruzando mis brazos.

-Bueno, nunca sucedió, lo olvidé, así que no te lo dije, así que, ¿cómo está?- Mi hermano preguntó, una cosa sobre él es que es una persona afectuosa y tiene un corazón amable, y le amo por eso.

Al principio, cuando dijo el nombre de Jason, pensé que algo malo iba a pasar, no lo puedes ver más, no es bueno para ti, no te relaciones con personas como él... pero ¿cómo podría pensar que mi hermano no juzga a las personas? Busca el lado positivo en las personas, no el negativo.

-Um está muy bien, si quieres hablar con él alguna vez, podría llamarle y decirle que venga, estoy bastante segura de que le gustaría verte de nuevo.- Le dije, mi hermano me sonrió.

-Me gustaría.- él dijo

-Bueno, déjame hacer esta llamada, te devolveré tu teléfono en un rato.

-Está bien, estaré arriba en mi habitación.

-

-Sí, estoy en el centro comercial.- Le dije a Josh que me olvidé de decirle que iría de compras.

-Bueno, ten cuidado, te amo niña.

-Te amo adiós.- Colgué el teléfono.

Aparqué mi auto en el estacionamiento del centro comercial, aquí vamos, me alegro de que este sea mi último año de secundaria, pero tengo que ir a la universidad.

Ugh.

Salgo del auto, agarré mi bolso y entré al centro comercial.

Primero voy a una tienda de zapatos, luego a tiendas de ropa, y voy a buscar algo para comer.

Voy a una pequeña pizzería y pedí una pizza de pepperoni y unos palitos de pan con queso. Cuando volví a mi auto, vi a Becky caminando hacia mí, subí a mi auto tan rápido y cerré con llave.

Becky comenzó a tocar en mi ventana. -Tina, ¿por favor puedes bajar la ventana?,- Mi hermano tenía razón, parece enferma, eso es lo que las drogas te hacen, supongo.

Resoplé y bajé la ventana,- ¿Qué quieres Becky?- Le pregunté poniendo los ojos en blanco.

-Sé que no quieres hablar conmigo, no te culpo, pero conseguir algo del dinero de Jason, y quería que se lo dieras.- Ella dijo y me entregó una bolsa, la abrí para asegurarme de que era el dinero de verdad.

-¿Por qué quieres que se lo dé? ¿Por qué no puedes hacerlo?- Le pedí que pusiera la bolsa en el asiento del pasajero.

-Porque le tengo miedo y no importa cuán enojada estés conmigo, igual ayudarías a una amiga.- ella tenía razón, pero no iba a darle mi dinero para dárselo a Jason.

-Está bien, se lo daré, y Becky la próxima vez que te vea, será mejor que te encuentres sana, no estoy bromeando.

-Lo haré, adiós, Tina.

-Hasta luego Becky. Subí la ventana y encendí mi auto. No sé si debería llamar a Jason o aparecer en su casa.

Voy a llamar, porque sería un error aparecer en la casa de alguien. Llamé a Jason, respondió en el segundo timbre.

-Hola Jason-, sonreí, ¿por qué estoy sonriendo? Se supone que debo odiarle. ¿A quién estoy engañando? No puedo.

-Hey niña.- Me gusta el nombre, me reí pensando en ello.

-¿Tú ... solo te ríes?- Preguntó.

-¿Qué? No, este no es el punto, estoy llamando para preguntar si puedo ir a tu casa, tenemos que hablar.

-¡Wow! ¿Vamos a hablar de nosotros, porque nosotros...- Le interrumpí.

-No, no estoy hablando de nosotros, estoy hablando de Becky.- Le dije, y si íbamos a hablar de nosotros, ¿qué le pasa a eso?

-Um, sí, ven.- me dijo y colgó, está bien, es bipolar.

Tiré mi teléfono en el asiento del pasajero y manejé hacia la casa de Jason.

-

Me detuve en la entrada y aparqué mi coche. Agarré la bolsa y mi teléfono, y caminé hacia su puerta.

Llamé a la puerta, Jason solo gritó que estaba abierta. Entré y grité -Jason, ¿dónde estás?- Le tomó un minuto para responder.- Espera un minuto, estoy haciendo algo.

Un minuto después bajó con una chica y me sonrió, no con una sonrisa burlona, ​​sino con una sonrisa genuina. Solo le devolví la sonrisa y salí por la puerta. Está bien, ahí va mi corazón, es por eso que no capturo sentimientos por alguien.

-Um , aquí tienes el dinero.- Dije y mi voz se quebraba un poco, le tiré la bolsa de dinero.

-¿Para qué es esto?- Él me preguntó confundido.- ¿Me debes dinero?- Estaba tan perdido, su rostro era tan lindo que solo quería agarrarlo y besarlo.

-No, no, no es mío, es de Becky.- Dije sacudiendo mi cabeza, caminando más cerca de él.

-Oh, ¿por qué no me lo dio?- Dijo agarrando la bolsa, y caminando hacia su habitación, supongo que quería que le siguiera.

-No sé si te tiene miedo,- le dije sentándome en su cama, estaba mirando alrededor de su habitación, no huele a sexo, pero huele a hierba, estaba vendiendo drogas, ahora me siento mejor .

-Bien, quiero que me tenga miedo, ¿por qué no me tienes miedo?- Me preguntó, me levanté y miré su cuerpo sin camisa.

-Porque no hay nada de qué temer".-Dije caminando hacia él.

-¿Estás seguro, qué pasa si te digo que hago cosas ilegales, me tienes miedo?- Le miré y me reí. ¿Está hablando en serio? Sé que vende drogas.

-¿Qué es tan gracioso, niña?- Susurró en mi oído, me puso la piel de gallina.

-Bueno, sé que vendes drogas.- Dije.

-Eso es todo lo que crees que hago.- Él rió.

-Ok, bicho raro. Bueno, ya tienes dinero, así que debería irme.- tartamudeé un poco.

-No, puedes quedarte aquí conmigo,- me acercó a su pecho y sentí un frío metal contra mi pecho. Miré hacia abajo y vi una cadena de oro con una cruz.

-Bonita cadena,- le dije a Jason.

Miró hacia abajo y lo recogió,- Gracias a la cruz estoy unido a mi madre.

-Sí, sé lo que le pasó a tu madre, y lo siento por ello.- Dije.

-¿Cómo sabes sobre mi madre?- Dijo con voz enojada, pero puedo calmarlo.

-Jason escucha, ¿Conoces a mi hermano Josh?- Le dije.

-Sí, sabía que Josh tenía una hermanita. Wow, ya decía yo que me parecías familiar, te pareces a tu hermano. Tu hermano me ayudó cuando mi madre estaba en el hospital.- Me dijo.

Me preguntó cómo se enteró mi hermano de él, así que le conté todo.

-Wow, este mundo si que es pequeño.- Jason dijo, frotando la parte de atrás de su cuello como si supiera algo que yo no.

-Sí, mi hermano quería saber cómo estabas.

Jason y yo hablamos un rato, le di el número de mi hermano y me fui a casa.