- Josh , voy a comprar al Starbucks, ¿quieres algo de la tienda?- Le pregunté a Josh agarrando las llaves de mi auto.

- Sí, consígueme los ingredientes para hacer chile.- Dijo metiéndose la mano en el bolsillo trasero para agarrar su billetera.

- Aquí hay sesenta dólares, ¿eso debería ser suficiente, y vas a salir de la casa vestida así?- me dio el dinero y se guardó la billetera en el bolsillo trasero.

Miré mi atuendo, -¿Qué pasa con mi ropa?- Pregunté cruzándome de brazos.

- Nada, solo ve a por la comida que tenemos chile esta noche, adiós, ten cuidado.

- Te quiero, y lo haré.- Dije agarrando mi bolso, salí y entré en mi Jeep Wrangler negro. Amo mi auto. Se llama Sammie, ahorré mucho dinero para comprar a mi bebé.

Encendí mi auto y conecté el cable auxiliar a mi teléfono para poder reproducir mi música.

Conduzco hacia la la tienda. Dios, odio conducir. Estaba tan emocionada cuando obtuve mi carnet por primera vez, pero después de un tiempo me cansé de conducir. Aunque puedo ir a donde quiera.

Doblé la esquina donde estaba Starbucks y me detuve en frente. Pedí un doble de frappe de chispas de chocolate, y luego pagué.

Me fui y me dirigí a la tienda de comestibles a comprar la comida para que mi hermano pudiera hacer la cena, pero noté cuando me fui, en mi espejo retrovisor, que un coche aceleró y me estaba alcanzando.

Doblé una esquina solo para ver si me estaban siguiendo, pero doblaron en la misma esquina que yo. Yo aceleré un poco y el del coche también. Aceleré un poco más, y doblé algunas curvas más, espero no ser detenida ni accidentarme y morir.

¿Qué quiere esta persona de mí? ¿Por qué me sigue? Siento que estoy yendo con mucha velocidad. Esta persona realmente tiene dejarme en paz, necesito recoger los ingredientes de la comida, para que mi hermano pueda hacer la cena. Tengo hambre.

Estoy más preocupada por la comida que por la  persona que me sigue podría matarme.

Me dirigí a la tienda de todos modos. Aparqué el coche y salí corriendo del coche a la tienda.

Estaba jadeando y resoplando. La gente me estaba mirando extraño pero solo si supieran que alguien me seguía, creo que era un asesino.

Miré a la ventana y vi que el auto estaba estacionado cerca del mío. Compré los ingredientes de la comida e hice la cola de espera, luego pagué por ello.

Al salir, corro y entro a mi coche lo más rápido que puedo. Tiro las bolsas en la parte de atrás y enciendo el auto.

Dios, solo permíteme llegar a casa sana y a salvo. Mientras retrocedía, alguien comenzó a tocar mi ventana, volteé para ver la ventana.

Nunca he saltado tan duro en mi vida.

-¡Mierda!- Bajé mi ventana con la mano en mi corazón.

- Entonces, ¿quieres seguirme ahora, literalmente no tienes vida? Jason, tienes que dejarme en paz.

- No, es una cosa. Tu amiguita me ha estado evitando y tú eres cercana a ella.- Dijo serio,  juro que este tipo es bipolar.

- Bueno, si piensas que soy más cercana a ella, no he hablado con ella desde la fiesta. Y realmente no quiero serlo después de lo que me dijiste, y que ella me mintió básicamente.- Dije.

- Pero sabes su dirección, podría aparecer.- él me miró, después de que terminó de hablar. Espero que no piense que se la voy a dar. Podría estar enojada con ella, pero no le daría su dirección a un extraño.

- Sí, no te la voy a dar, adiós Jason.- Dije cerrando mi ventana, pero Jason puso su mano en ella para evitar que la cerrara.

- Jason, si no mueves tu mano, la romperé.

- No lo harías, no lo harías.- No debe conocerme lo suficiente.

Cerré la ventana un poco más y estaba a punto de aplastar sus dedos, pero él movió su mano. Jason comenzó a golpear mi ventana con fuerza, como si fuera a frenar. Podría golpearle el culo.

Abrí la puerta de mi auto y salí,- Jason, no te voy a dar su dirección, ni siquiera quería darte su número.¿Por qué no te vas a casa y la dejas en paz?- Dije cruzándome de brazos.

Estaba a punto de agarrar a Jason del brazo, pero él me detuvo agarrándome de la muñeca.

- Mira niña, tu amiga robó muchas drogas que valían mucho dinero.Ahora, si no me dices dónde vive, podría estar en peligro y no de mí.-susurró en mi oído, su aliento caliente golpeaba mi cuello.

Este era el momento totalmente equivocado para excitarme con esto, estaba temblando bajo su toque y él lo sabía.

Se supone que debo odiarlo, no estar excitada por él, pero él era innegablemente sexy y no pude evitarlo.

Jason me miró de arriba abajo y sonrió. Soltó mi muñeca, pero agarró mis caderas.

-Te ves sexy así, ¿no lo sabes?- Dijo, apoyándome contra mi auto. Estoy sorprendida de que nadie haya visto esto ni haya dicho nada, pero estaba oscuro afuera y a la gente de por aquí les importa una mierda.

-¿Gracias?- Dije. Jason se inclinó y comenzó a besar mi cuello. Dios, se sentía bien, casi dejé escapar un gemido. No podía dejarle saber que estaba disfrutando esto. Pero él sabía que lo hacía, porque no lo había empujado.

Jason comenzó a chupar y mordisquear mi cuello, y no pude evitarlo. Pero cerré los ojos y dejé escapar un gemido, nadie nunca me había hecho algo así, y se sintió bien. Se apartó y yo abrí los ojos, y cuando lo hice, le sonreí.

No pude evitar pensar que se veía tan bien, agarré su rostro y atrapé sus labios con los míos. Supe que fue atrapado por sorpresa, porque le tomó un poco de tiempo devolverme el beso. Chispas, eso es todo lo que sentí cuando lo besé. Mi teléfono comenzó a sonar, y me alejé, y miré el identificador de llamadas

-¡Mierda! Tengo que irme.- Dije alejándome de Jason. Me acabo de dar cuenta de lo que acabo de hacer, no puedo creer que acabo de besar a este tipo. Wow. Tina, genial, no conoces al tipo y se supone que debes odiarlo.

-¿Te importaría llevarme?- Jason me preguntó, le miré confundido, ¿Por qué iba a llevarlo si su auto estaba estacionado allí mismo?

-¿Por qué iba a hacer eso? Tu auto está ahí.- Señalé el auto en el que me estaba siguiendo.

- Ese no es mío, caminé hasta aquí.- dijo él, mirándome confundido.

- Entonces, ¿de quién es el coche?- pregunté.

- No lo sé, y no me importa, ¿puedes llevarme?

- Umm, sí, entra.

Si ese no era el auto de Jason, ¿de quién era?