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Los quiero❤️

Gracias por leer y por comentar personita bellas😘

Después del fiasco de cita cuádruple que tuvieron el viernes. Harry y Louis decidieron tener una cita solo ellos, pero con un pequeño cambio, uno de seis años. Decidieron no pensarlo tanto y simplemente hacerlo, simplemente ya decirle.

El domingo es el día en el que todos están en casa con su familia y eso es lo que haría Louis. Primero irían a desayunar al restaurante favorito de Darcy, que si también es el favorito de Niall es sólo coincidencia. Después volverían a casa a ver películas y justo después de la hora de la comida, sería el momento. O al menos así lo imaginó Harry.

Pero cuando llegó el día, se quería retractar, sabía que su hija quería a Louis, pero todo ese miedo que el ojiazul siempre tuvo, se lo fue transmitiendo poco a poco.

Louis llegó a la hora indicada del desayuno. Darcy no sabía nada, por lo que cuando sonó el timbre de la casa corrió a la puerta y la abrió.

-¡Louis!- gritó alegremente- Hola ¿que haces aquí?¿Y Parker?

-Hola, princesa. No vino Parker- cargó a la pequeña y dejó un besito en su mejilla- Vine solito a ver si querían ir a desayunar, pero- hizo un perchero falso- creo que no me quieres aquí, será mejor que me vaya- hizo como si la fuera a bajar, pero la niña se apretó más a él.

-No, Louis. No te vayas- beso su mejilla y lo tomó del rostro- por favor.

-Solo porque me diste un besito- dio otro Besito en su nariz y bajó a la pequeña.

-¿Porque no vino Parker?- La mayoría de las veces que veía a Louis era con su mejor amigo.

-Porque se quedó con su otra abuelita- ambos hicieron un puchero- Pero si solo me quieres con Parker yo me puedo ir.

-No, Louis, quédate por favor- puso sus manitas juntas suplicando- Ahora no voy a tener que compartirte.

Louis sonrió radiantemente, no quería crearse expectativas, pero todo indicaba que todo saldría bien. Darcy lo aceptaría y serían una linda familia.

-De acuerdo, me quedo- la niña volvió a sonreír- ¿Y tu papi?- la niña se encogió de hombros y se fue corriendo a avisarle a su padre quien había llegado.

-¿Porque tan sonriente? Todavía no me habías visto- preguntó Harry una vez que llegó a la puerta. Lo invitó a pasar. Tenían muchas ganas de besarse, pero no lo harían.

-Creo que no tengo nada de que preocuparme, ¿cierto?- se sentaron en el sillón de la sala.

-Te lo he dicho muchas veces, pero nunca me crees- se quedaron en silencio, pero Harry estaba muy metido en sus pensamientos.

-¿Que pasa?- preguntó preocupado, la vista de su rizado estaba perdida en algún punto de la mesa de centro- ¿Ya te arrepentiste de decirle? No tenemos que hacerlo hoy, fue solo una sugerencia, pero yo puedo esperar...- unos labios lo callaron.

-No, si le vamos a decir, solo que...- no lo volteo a ver, seguía viendo la mesa- me puse a pensar en todos los posibles escenarios y me enfrasque en los peores y no quiero que pase eso.

-¿Piensas que va a reaccionar mal?-el pánico volvió a Louis.

-No lo sé- se miraron a los ojos y Harry le transmitió todas las dudas que tenía.

-Harry, si no lo quieres hacer hoy, puedo esperar- lo tomó de la mano y la acarició.

-No... Yo- lo interrumpieron.

-Papi, vino Louis solito, sin Parker... Va a ser todo para nosotros hoy y nos va a llevar a desayunar- Darcy llegó corriendo ya cambiada con una blusa verde con detalles azul, un shor-falda de mezclilla y converse blancos.

Combinaba a la perfección con los dos, o mejor dicho era una combinación de los dos. Harry vestía una playera en cuello v, color azul, jeans y botas cafés. Louis, por otro lado, portaba una camisa en color verde, jeans y vans negras.

-¿Y eso está bien contigo? Que haya venido sin Parker- seguía probando a su hija en cuestión a Louis.

-Si, Parker está con su otra abuelita- Darcy hizo una mueca con su boca- ¿yo también tengo otra abuelita, Papi?- el corazón de Harry se aceleró rápidamente, no esperaba ese tipo de preguntas tan temprano y menos ese día.

-Creo que será mejor que nos vayamos al restaurante, ¿si?- Louis lo salvó, vio como el rizado se quedó sin palabras.

-¡Si!- corrió a la puerta y al ver que ninguno de ellos se levantó, volvió a donde los dejó, los tomó de la mano y los empezó a jalar- Ya vámonos.
-

Llegaron al restaurante en la camioneta de Harry, que Louis condujo. La niña estaba maravillada por ir con ellos dos. Fueron cantando todo el camino y riendo de los chistes malos del rizado.

-Buenos días, bienvenidos al Waffle Feliz, ¿Mesa para tres?- dijo la hoostes.

-Cerca de los juegos, por favor- pidió la pequeña.

-Tus deseos son órdenes- le dijo a la niña- Síganme por favor.

Los llevó a una mesa cuadrada. Harry en medio, Darcy y Louis estaban de frente. El rizado se sintió especial, tenía a sus amores a su lado y por un momento vio como sería su futuro y lo quería, lo necesitaba, lo había deseado desde siempre.

La mesera llegó a pedirles sus bebidas, dos jugos de naranja para los adultos y una leche con chocolate para la niña, quien en cuanto pidió su bebida, se fue al área de niños.

-Tienen una muy bonita familia- expresó la joven mesera- en seguida les traigo sus bebidas.

-Si, la tengo- Louis tomó la mano del rizado y la besó.

Harry sonrió ante el acto y lo dicho. La mesera volvió con sus bebidas y pidieron su desayuno.

-Waffle Sandwich Belga, para mi- pidió Harry- y para la niña Waffle con tocino.

-Yo lo mismo que él, por favor- encargó Louis.

-Los Waffle infantiles vienen con un helado de postre, ¿chocolate está bien?- informó la mesera.

-No, todo menos chocolate. Vainilla o fresa, por favor- la mesera asintió a la petición, retiró los menús y se fue a la cocina.

-¿Cuál es el problema con el chocolate?- Louis había tenido esa duda desde hace mucho, pero hasta ahora preguntó.

-Darcy es algo así como alérgica al chocolate- explicó Harry- Cuando estaba chiquitita, Niall le daba muchos dulces y una vez tuvimos que ir a urgencias porque estaba rascándose mucho unas ronchas que le salieron. Pensamos que era alérgica al cacahuate, pero al parecer es algún tipo de químico o sustancia que le ponen exclusivamente al chocolate, la verdad no entendí muy bien en esa ocasión- hablaba rápido y agitado- le comenté a su pediatra y dijo que hasta que no supiéramos que le ocasionaba esa alergia, sería mejor que la alejemos del chocolate. Hasta ahora sólo puede comer los de las monedas de chocolate, pero sólo de una marca. Evitamos que coma y ella sabe que no debe, pero estamos atentos a cualquier cosa.

-Es bueno saberlo, para algún futuro, espero cercano- respondió el ojiazul.

-Niall decía que fue tu culpa- se rio un poco al mencionarlo.

-¿Yo que tengo que ver con eso?- preguntó Louis algo divertido.

-Tu perfume olía a chocolate y a mi me gustaba, pero cuando me embaracé ya no podía olerlo- explicó el rizado- Niall decía que lo olí cuando estábamos- se aclaró la garganta y agachó la mirada para que no notara lo rojas que estaban sus mejillas - cuando la concebimos y por eso es alérgica.

-Eso es lo mas tonto que he escuchado- Louis se rio, llamando la atención la gente, por lo que se tapó la boca y evitó su risa.

-Lo sé, pero Niall estaba muy seguro- el rizado también rio- Hasta la fecha sigo sin tolerar el olor a chocolate. Lo puedo comer, pero no oler. No tiene sentido.

Su plática se cortó momentáneamente, pues Darcy llegó corriendo, se sentó en su silla, tomó de su bebida y se recargó en el respaldo de su silla viendo sus manos, algo triste.

-¿Que pasó, amor? Todavía no traen la comida- indagó Harry.

-Es que Bastián está en los juegos y me está molestando- dijo con un puchero en sus labios.

Louis hizo la finta de levantarse, pero el rizado lo detuvo. Sabía que eso no terminaría bien, pues el ojiazul es muy impulsivo. Era un niño con quien pelearía y sabía que no le importaba al mayor.

-¿Que te hizo?- preguntó acariciando su cabello, todavía sin soltar a Louis.

-Él...- suspiró Darcy- Él me preguntó con quién venía y... Yo le dije que con... Con mi Papi y mi Louis y... Él me dijo que debería tener dos papás y no un papá y un Louis y... Y después me empujó.

Eso fue todo para Louis, quien se levantó de golpe con mirada asesina mirando hacia el lugar donde estaban los juegos infantiles. No sabía quién era, pero eso no sería impedimento para defenderla.

-¿Dime cuál de esos es? Ese mocoso se equivoco de niña. Nadie se mete con mi...-

-¡Louis!- Harry lo detuvo antes de que dijera algo más de lo que todavía no debía decir- Amor, te prometo que hablaré con Clara para que llamen a sus padres ¿de acuerdo?- la niña asintió y le regalo una tímida sonrisa.

-¿Eso es lo único que vas a hacer? ¿Hablar con sus padres?- Louis se había vuelto a sentar y habló lo más calmado que pudo- Hazz ese niño fue el culpable del accidente y sigue molestándolos.

-Lo sé, Louis. Pero yo aquí no tengo autoridad- trató de razonar con él- Y no creo que sea buen ejemplo que te pelees con un niño de seis años.

-Yo no voy a hacer nada. Pero si se le vuelve a caer un diente a ese niño, tal vez tenga que llevar a cierto otro niño de ojos azules por un helado- dijo inocentemente.

-Mi Louis es gracioso- Darcy comenzó a reírse. Era toda arruguitas y hoyuelos. Haciendo que ambos adultos se enamoraran más de ella.

-Princesa, si ese niño odioso te vuelve a decir algo- se acercó a la niña por encima de la mesa, con su voz en tono de secreto- tu dile que si tienes dos padres que te aman mucho- la pequeña abrió mucho sus ojos, haciendo que Louis se arrepintiera de sus palabras.

-¿Tú... Tu lo sabes, Louis?- preguntó Darcy casi sin aliento.

-¿Saber que?- ambos adultos dijeron en coro.

La pregunta quedó en el aire, pues la mesera llegó con su comida y se dispusieron a desayunar. La pequeña ya se encontraba mejor de ánimo y se le notaba porque no dejaba de platicar acerca de lo bien que la pasó el viernes con su... Abuela Jan y Parker.

-¿Que quieres hacer después de aquí, princesa?- preguntó Louis una vez que la mesera retiró sus platos y el helado de Darcy llegó.

-¿Como que?- regresó la pregunta.

-Cómo ir al parque o regresar a casa a ver películas y comer palomitas o jugar con Simón- dio opciones- lo que tu quieras.

-¿Lo que yo quiera?- la ilusión en su cara lo decía todo. Puso su manita debajo de su mentón pensando en lo que quería hacer- Quieeerooo... ¡Ver películas!- grito levantando las manos.

-Bien, entonces termina tu helado y vamos a casa a ver películas- dijo Harry acariciando la mejilla de su pequeña.

El momento se acercaba y Harry no podía con las avestruces en su estómago de los nervios. No sabía cómo reaccionaria su hija y necesitaba que todo saliera bien. Su hija era muy inteligente y tendrían que hablar con ella como si fuera grande, haría muchas preguntas y necesitaban contestarlas de la mejor manera para que entendiera las razones de Louis, pero que también supiera que el ojiazul siempre quiso estar en su vida y que la ama tanto como Harry.
-

-Fallaste, fallaste, ajá, ajá, ajá. Ya no cenaste hoy, wu, no cenaste hoy, no, no, no, no, cenaste hoy estas a dieta yyyyyyy...- cantaron Darcy y Louis al unísono, bajó la mirada divertida y amorosa de Harry.

Esos dos eran iguales, sus sincronía era algo que debería de estudiarse.. En algún punto de la película el rizado se quedó viendo a los dos y pudo presenciar, como se emocionaban, se reían, se rascaban la cara, se mordían los labios y fruncían la nariz al mismo tiempo. Estaban completamente conectados.

-Papi, te estás perdiendo la mejor parte- lo llamó Darcy cuando se dio cuenta que los veía.

-Lo siento, amor- se abrazó a la pequeña que estaba en medio de sus progenitores- es que estas tan hermosa que no puedo dejar de verte- la sentó en sus piernas e instintivamente los dos adultos se acercaron- Te amo- dijo besando la mejilla de la pequeña que trataba de ver la película.

-Yo también te amo, papi- se acurrucó en los brazos de su padre y se dirigió al otro adulto- ¿Tu nos amas, Louis?

El ojiazul tenía tantas ganas de decirle que si, de gritárselo a todos y lo haría, pero en ese momento no era la mejor opción. Miró a Harry con ojitos suplicantes mientras abría y cerraba su boca buscando que decir.

El momento había llegado.

Darcy iba a saber quién era su otro padre. Había dos opciones: que lo tomara bien y empezarán a ser una familia los tres, o que lo odiara completamente por haberla abandonado. Esa opción es la que más miedo le daba a los dos padres. Pero no sabían que había una tercera opción, una que nunca imaginaron en todos esos escenarios fatalistas.

-Amor, ¿Crees que podemos tener una conversación contigo... Una de niños grandes?- preguntó cuidadosamente Harry.

-¿Una conversación de niños grandes?- la pequeña abrió mucho sus ojos, ya había tenido dos de esas hace poco tiempo y lo que le dijo su papá en esas pláticas habían sido muy buenas noticias, por lo que esperaba que estaba vez fuera igual- ¿Cómo cuando me dijiste que mi tía Gems tenía a mi primita en la panza?- el rizado asintió con una pequeña sonrisa en su rostro, pero por dentro estaba muy nervioso- ¿O como cuando me dijiste que nos íbamos a venir a Londres?

-Si, justo así- concordó- Recuerda que en las pláticas de niños grandes necesitas estar muy atenta y cualquier duda que tengas te la responderé de acuerdo a tu edad, ¿si?

Louis estaba impresionado de como le hablaba a la niña y de como esta, respondía como si entendiera todo lo que le estaban diciendo.

-Bien entonces, comencemos- volvió a hablar el rizado y miró a Louis esperando que lo ayudara y así fue.

El castaño sabía que él tenía que empezar a hablar, pero todo lo que había practicado un día antes se borró totalmente de su mente.

-Darcy- se atrevió a hablar, pasando saliva con dificultad antes de continuar - tu papi me ha dicho que tu quieres saber quién es tu otro papá, ¿cierto?- no la miraba, solo veía sus manos, pero la respuesta de la niña lo hizo levantar su mirada hacia ella.

-No- dijo simplemente.

-¿No?- Harry estaba sorprendido.

-No- volvió a decir- yo ya sé quien es mi otro papá- se encogió de hombros y se acurrucó en Harry.

-¿Como?... ¿Cuando?... ¿Quien?...- fueron preguntas que al rizado se le vinieron a la mente, pero no podía concluirlas.

-No sé si puedo decirlo- dijo algo apenada, tapando su carita.

-Amor, tu nos puedes decir lo que sea- la alentó a que hablara.

-Es que yo no sé si él sabe que yo soy su hija- Darcy miraba sus manitas y hablaba con voz baja, audible apenas si te acercabas.

-¿Nos pudieras decir quién crees que es tu otro papá?- intentó ahora Louis.

-Yo no creo, yo lo sé- Darcy le lanzó una mirada prepotente y a la vez tierna, pero eso solo ponía más nervioso a Harry.

-De acuerdo- el rizado relajó el ambiente- ¿Nos puedes decir como supiste quién es tu otro papá?- preguntó lo más tranquilo que pudo para que su voz no delatar a lo nervioso que estaba.

Harry sabía que su hija era muy inteligente, pero no tenía idea que fuera tan buena como para poder enlazar historias e identificar a su padre con lo poco que él le había contado.

-No fue fácil- su rostro parecía cansado, pero tierno- Tu no me decías nada, pero lo supe cuando lo vi- sonrió mirando a su papá- Y cuando me abrazó... Y cuando me decía lo hermosa que soy- los tres sonreían, pero los adultos lo hacían de nervios- lo sentía aquí en mi corazoncito- se tocó el su pecho sonriendo hacia Harry- Y más cuando él me lo dijo.

-¿Que te dijo?- el rizado miró a Louis con algo de duda y una pizca de enojo.

-Lo que tu me dijiste que me iba a decir- sonaba como algo tan obvio para la niña y Harry se relajó- que fue como amor a primera vista.

-¿Eso te dijo?- la pequeña sonrió y asintió, pero no se animaba a ver a Louis. Ella todavía pensaba que no sabía- ¿Todo este tiempo lo supiste? ¿Por qué no dijiste nada?

-Porque no quería que lloraras, Papi- Harry intentó negarlo, pero Darcy continuó- una vez escuché que estabas llorando porque el tío Niall dijo su nombre.

Harry lo recordó, fue después de que se le escapara el nombre de Louis, cuando nombraban al conejo de peluche y fue cuando lo entendió. No era un secreto el nombre del accesorio para dormir, su hija no lo quería ver llorar.

-¿Por eso no querías que nadie supiera el nombre de tu conejo?- preguntó acariciando la mejilla de la menor.

-No quería que volvieras a llorar- Darcy bajó la mirada a sus manitas.

Louis había estado viendo y escuchando como si no estuviera ahí. No quería interrumpir el momento, sin mencionar que estaba totalmente impactado por la inteligencia de su hija. Más a parte, no sabría que decir, en qué momento entrar a la conversación, o como simplemente adjudicarse un lugar que hasta el momento le han dado.

-Amor- el rizado levantó el rostro de Darcy- Yo soy quien te tiene que cuidar, no tu a mi- beso su frente y ambos sonrieron.

-Lo sé, Papi- la niña se encogió nerviosa, sonriendo y después de un momento, recordó algo- Mi deseo se hizo realidad.

-¿Que deseo?- no fue la mejor forma de meterse a la conversación, pero las palabras salieron antes de que pudiera procesar lo que estaba pasando.

Darcy miró a Harry con complicidad, para después posar su mirada en Louis. Sus deseos sólo los compartía con su padre, pero Louis también lo era. Le pidió permiso al ojiverde con la mirada y este le dio la aprobación que necesitaba.

Se levantó de las piernas de su padre y se colocó sobre sus rodillas frente a Louis. Su vista no perdió en ningún momento los movimientos de Darcy, quien le sonrió tomando sus manos.

-Tu fuiste mi deseo- dijo- Deseé poder conocerte.

-¿A mí? ¿Gastaste tu deseo en mí?- Darcy asintió con sus ojitos verdes brillando con emoción.

-Amor, pero tu ya sabias quien era él, ya lo conocías- Harry salvó a Louis. El ojiazul estaba sin habla, los dos estaban tan sorprendidos. Su pequeña hija los enseñaba cada día de su vida.

-No, Papi- se rio por lo ingenuo de su padre- yo quería CONOCERLO- los dos adultos no entendían a lo que se refería, por lo que continuó- ahora ya se que su color favorito es el verde, como nuestros ojitos. Sé que le gusta hablar en las películas como a mí- Louis se rio por eso, encantado, con sus ojitos cristalinos- su película favorita es "Vaselina", le encantan los conejos, pero no sabe nada sobre ellos- rodó los ojos- y no le gusta que le digan que es pequeño- Harry sonrió maravillado- aunque lo es- dijo en voz secreta/no tan secreta a su padre. La risa le ganó.

-¿Me estas diciendo pequeño, pequeña?- La miró con indignación y algo de diversión en su cara.

-Yo no soy pequeña. Todavía no termino de crecer. Seré tan alta como mi Papi- bipolaridad, pensó Harry. También compartían la bipolaridad.

-Lo serás, Dar- el rizado extendió sus brazos para atrapar a la pequeña y volver a ponerla en su regazo. Abrazándola y besando su mejilla.

-Entonces...- Louis habló después de un tiempo en silencio. Se tomó su tiempo para saber que decir- ¿Estas bien con que yo sea tu... Tu...- respiró profundo y pasó saliva con dificultad, era la primera vez que se lo decía- tu otro papá?

-Pues si- dijo como si fuera lo más obvio del mundo- Pero no te vuelvas a ir.

-Por supuesto que no me iré- la tomó en sus brazos y la sentó en su regazo- Te amo, princesa, te amo como nunca imaginé amarte- Darcy se abrazó a él mientras este repartía muchos besos por toda su cabeza- Ser tu papá es de las mejores cosas que me han pasado.

Harry no evitó derramar algunas lágrimas, esos dos lo iban a matar de amor. Pero al final del día seguía siendo una niña curiosa, que aunque ya supiera muchos cosas, necesitaba saber más.

-¿Porque tardaste tanto en venir a verme?- preguntó después de un tiempo mirando a Louis.

-Yo...- sus nervios volvieron, pensó que ya se había librado de esa plática.

-Darcy- llamó Harry- Louis siempre te ha amado, aunque no estuviera cerca, él siempre pensó en ti.

-Eso ya lo sé, siempre me lo haz dicho- a veces era un poco grosera, pero normal para su edad. Los niños no son perfectos- Lo que quiero saber es ¿Por qué no me visitó antes?

-Creo que yo tuve algo que ve...- el rizado quería responsabilizarse de lo sucedido, pero Louis no se lo permitiría.

-No- lo detuvo- Dar, ahora tu y yo vamos a hablar como niños grandes ¿de acuerdo?- la pequeña asintió, muy atenta al ojiazul- Cuando me enteré que tu estabas en la pancita de tu papi, yo no me sentía preparado para ser papá- ella lo miró extrañada- Yo pensaba que no sería bueno para ti y que tu me ibas a odiar.

-Pero yo no te odio- dijo lo mas rápido que pudo.

-Lo sé, amor- la tranquilizó- ahora lo sé- besó su frente- Mi papá, tu abuelo, me ayudó a darme cuenta de eso. Me dijo que no existe un manual para ser padres y que si te trato con amor y respeto, poniendo ciertos límites, como tu Papi lo ha hecho hasta ahora- miró a Harry y este le sonrió en entendimiento- tu crecerás siendo una niña maravillosa. Y estaba en lo cierto, porque lo eres- volvió a besar su frente.

-¿Tu Papi te ayudó a ser mi papi?- No había entendido del todo lo que le dijo, pero quería saber más de su abuelo. El ojiazul asintió- ¿Cómo es él? ¿Cuándo lo puedo conocer?

-Amor- Harry tuvo que hablar, pues sabía cuánto le dolía a Louis hablar sobre su padre- Tu abuelito ya está en el cielo.

-Oh- la pequeña bajó la mirada, algo triste, seguido de eso, se abrazó más a Louis- Él te amaba mucho- dijo la niña, haciendo reír al mayor.

-Él nos amaba, a ti, a tu papi y a mi- la abrazó más, mirando a Harry- Y yo los amo a ustedes, mucho.

Harry no podía dejar de derramar lágrimas. Todo estaba siendo demasiado irreal. El que Darcy supiera, que lo haya tomado tan bien, que Louis le estaba demostrando todo lo que le dijo que haría. Era demasiado para él, pero no lo hubiera deseado de otra manera.

Harry se acercó a ellos y los tres se abrazaron. La película había quedado en el olvido, seguía prendida, pero la plática era más importante.

-Tengo una última pregunta- dijo Darcy algo nerviosa.

-¿Cuál, princesa?- la niña seguía en el regazo de Louis, pero se había separado para verlos a los dos.

-¿Como tengo que...?- detuvo sus palabras moviendo la cabeza- ¿Cómo quieres que...?- volvió a detenerse. No sabía cómo hacer esa pregunta- Es que...- suspiró un poco frustrada- tengo dos papás.

Los adultos se voltearon a ver entendiendo lo que la pequeña quería preguntar. ¿Cómo le va a decir a Louis? Esa era la duda de Darcy, totalmente válida.

-Darcy, tu puedes decirme como quieras- contestó Louis- Papá... Papi... Louis... Lou... Como tu quieras.

-Es normal que tu sientas esta confusión, amor- Harry besó la frente de la niña- Y si no estas lista para decirle papá a Louis, él lo va a entender- el ojizul asintió sonriéndole.

-Eso no es lo que pregunté- Darcy hizo una mueca de enojo. El rizado iba a contestar, pero le ganaron.

-Si somos honestos, no hiciste ninguna pregunta, monigote- contraataco

Era la primera "pelea" padre-hija y el Harry y estaba encantado. Louis había madurado mucho y estaba más que preparado para tomar su papel de padre. Esos dos eran iguales y ninguno daría su brazo a torcer, pero como adulto, el ojiazul  parecía preparado para lirear con el carácter de la menor.

-Está bien- exhaló cansada- Es que no se- se veía algo confundida.

-Hermosa, ¿Qué te parece si no lo piensas?- miró a Louis confundida- Simplemente dime como te salga del corazón.

-No me gusta cuando te dicen, Lou- hizo un puchero tierno, que le dio risa a los adultos.

-Hey, yo le digo Lou- se quejó Harry.

-Bueno, tu si le puedes decir así- lo pensó mejor- también el tío Niall y el tío Zayn y el tío Liam y la tía Sofía, pero nadie más- los adultos sonrieron.

-Entonces si alguien como... Emiliano, por ejemplo- los dos de ojos verdes pusieron sus ojos en blanco a la mención de ese hombre que le coqueteaba descaradamente a Louis en el zoológico- me dice así, ¿A él se lo recriminarías?

-Si, él no es bonito. No me gusta cuando se te acerca- definitivamente estaba un poquito celosa.

-¿Te digo un secreto?- la pequeña asintió- A mi tampoco.

-A ti te gustan los niños, ¿verdad?- la pequeña quería saber algo, pero necesitaba más información.

-Si- contestó- Bueno, me gusta UN niño en especifico- miró al chico en cuestión, totalmente enamorado.

-Oh, no sabía que tenías novio- su carita reflejaba tristeza, pero los adultos sólo se veían entre ellos.

-Todavía no es mi novio, pero espero pronto poder presentártelo, ¿Te gustaría?- cortó la conexión con los ojos de Harry y miró  a su hija, quien inmediatamente se alejó de él, poniéndose de pie, frente a los mayores.

-¡No! Y ya no quiero que seas mi papá- le gritó- Te odio- corrió hacia las escaleras y subió a su cuarto, dejando a los adultos muy confundidos.

-¿Que demonios acaba de pasar?- el corazón de Louis estaba muy agitado. Tenía menos de una hora siendo oficialmente el padre de Darcy y está ya lo odiaba. Su mas grande miedo se estaba volviendo realidad.

-No lo sé, pero deja voy a averiguarlo- Harry hizo el intento de levantarse, pero el ojiazul lo detuvo.

-No, deja voy yo. Recuerda que ya no estás solo. Déjame hacer esto, ¿si?- pidió Louis. Tomó las manos ajenas y dejó un beso en ellas, para después besar tiernamente sus labios.

El rizado asintió no muy seguro, pero estaba tratando. Debía dejar a Louis ser su padre también y hasta ese momento lo había hecho muy bien. Tenía que confiar.

El ojiazul se levantó del sillón y caminó hacia las escaleras. Esos escalones se sintieron eternos, parecía que no dejaba de subir, pero lo logró. Llegó a la puerta de Darcy, que estaba abierta y tocó para hacerse notar.

-¿Puedo pasar?- preguntó.

-No, vete. No quiero hablar contigo- dijo Darcy a través de su almohada.

-Pero yo si quiero hablar contigo- se adentró  a la habitación. Era la primera vez que estaba ahí y observó rápidamente todo el cuarto color lila- ¿Me puedes decir porque me dijiste esas palabras tan feas?

-Porque las sentí, porque mi Papi me ha dicho que me tengo que expresar- dijo todavía a través de su almohada.

-Tu Papi tiene razón, pero me hiciste sentir muy mal y ahora tu y yo estamos tristes- la niña sacó un ojo de la almohada para ver la cara de Louis que tenía un puchero falso.

-No estas triste, estas fingiendo- dijo volviendo a esconder su cara.

-Que no esté llorando no significa que no esté triste- acarició el cabello de la niña lentamente, por si está se alejaba, pero no lo hizo- Me duele mucho que ya no quieras que sea tu papá, pero si eso es lo que quieres, lo entenderé- sabía que sólo había sido un mal entendido, pero el hecho de pensar que fuera verdad, le dolía- De todas maneras siempre te voy a amar, a ti y a tu Papi.

-No es cierto- sacó su cabeza de la almohada, pero no sé levantó- Te vas a volver a ir, te vas a casar y vas a tener hijos y te vas a olvidar de mi. Y mi Papi y yo vamos a volver a estar solos.

-Oh, cariño- sonrió enternecido. Había llegado el momento de pedir permiso- Es que no me dejaste terminar.

-¿Que cosa?- Se sentó en la cama y sorbio su nariz, que estaba un poco roja por la presión.

-Primero que nada, de esas cosas que dijiste, hay algunas que son verdad y otras que son mentiras- tomó las manitas de su... hija y las besó- Si quiero casarme y si quiero tener mas hijos- Louis sonreía radiante, pero Darcy bajó la mirada, no queriendo escuchar lo que seguía- Pero jamás lo haría lejos de ti o de tu papá. Los amo a los dos, ustedes son mi familia.

-Pero...- Louis la interrumpió.

-Darcy, estoy enamorado de tu papá- la pequeña abrió mucho sus ojitos y poco a poco su sonrisa se fue haciendo más grande- Y si tu estas de acuerdo con eso me gustaría pedirle que fuera mi novio.

-Si, si, si- comenzó a brincar en su cama totalmente feliz- Si quiero- siguió brincando- Mis papis van a ser novios y se van a casar y voy a tener un hermanito- gritó agitada, cayendo en el colchón. Se abrazó al mayor y este le devolvió el abrazo- Te amo, Papi Lou.

Esa era la primera vez que Darcy lo llamaba papá, y fue perfecto. No lo pensó, simplemente lo sintió y eso era todo lo que necesitaba Louis. No tardó en derramar algunas lágrimas de felicidad y todo fue aún mejor cuando un rizado de ojos verdes, apareció por la puerta.

-¿Que es todo ese escándalo?- preguntó, como si no hubiera estado escuchando la conversación.

-Papi, mi Papi Lou tiene algo que preguntarte, ¿verdad?- el ojiazul se sintió entre la espada y la pared.

Por supuesto que quería preguntarle, pero de una forma romántica, no siendo presionado por su hija de seis años. Aunque pensándolo bien, que mejor momento que ese. Tenía todo lo que necesitaba en ese lugar, eran su hogar.

-¿Papi Lou?- trató de no derramar más lágrimas.

-Si, así me dijo mi corazón que le dijera- dijo como si no fuera la gran cosa.

-Bien, entonces ¿Qué tienes que preguntarme, Louis?- preguntó juguetonamente, había escuchado la conversación, pero no pensaba que el ojiazul lo fuera a hacer.

-Yo... Yo... Me gustaría... Tú... Quieres... Tu y yo- comenzó pero no lograba hacerlo, no estaba preparado. Se hundió en la cama, tal vez podría desaparecer.

-Papá, ya- Darcy se quejó, moviéndolo para que hiciera algo. Mientras el rizado trataba no reírse por lo nervioso que estaba Louis- Pregúntale.

-Bebé, no es tan fácil- esperó que su hija comprendiera, pero es su hija, por supuesto que seguiría insistiendo.

-Aquí el único bebé eres tú- hizo un puchero falso cruzando sus brazos.

-De acuerdo, de acuerdo- se rindió y se puso de pie, caminó hacia Harry y lo tomó de la mano- Hazz- su voz salió temblorosa, pero continuó- ¿Quieres ser mi novio?

El rizado sonrió amorosamente. Darcy comenzó a decir que si con la cabeza. Se tardó unos razonables treinta segundos en responder. Los más largos para Louis, si le preguntan.

-Si, Lou. Si quiero ser tu novio- la pequeña gritó de emoción y el ojiazul pudo volver a respirar.

-Dale un beso, Papi Lou- le gritó en "secreto"

-Tus deseos son órdenes, hija mía- los dos sonrieron enamorados y unieron sus labios en un beso lleno de amor. No tan largo como hubieran deseado, tenían audiencia.

-Si- la niña chillo de emoción- Mañana le voy a decir a todos.

-Amor, no le puedes decir a nadie todavía- Harry tuvo que detener a su hija, era algo... comunicativa.

-¿Porque no? Yo quiero que todos sepan que mi papi Lou es mi papá y que ustedes son novios- la pequeña no entendía, su puchero era verdadero.

-Lo sé, Dar. Yo también lo quiero, pero primero tengo que hablar con Parker, ¿si?- pidió el mayor.

-¿Porque?- la pequeña no entendía.

-Le tengo que decir que tu eres mi hija y que ustedes dos son primos de verdad- explicó y fue cuando Darcy lo entendió.

-¿Parker es mi primo?- abrió mucho sus ojitos. Su mente comenzó a hilar todo- Entonces... Entonces- los mayores asintieron, algo preocupados. No sabían cómo reaccionaria ante esa información- Entonces la tía Lottie es mi tía de verdad y Taylor mi prima y...- jadeo en sorpresa- Phoebe y Daisy y Doris y Ernest también lo son y la abuela Jan- tapó su boca con sus manos.

-Si, Dar. Mi familia también es tu familia- Louis se sentó en la cama, a su lado- Les tengo que decir y cuando ya lo sepan te los voy a presentar y te van a amar.

-Pero yo ya quiero decirle primo a Parker- hizo un puchero.

-Y lo harás- aseguró Harry- solo deja que tu Papi Lou le diga primero, ¿si?- estaba sentado al otro lado de ella- No es algo fácil.

-Prometo hacerlo pronto- dijo Louis- Y cuando lo haga los llevaré a comer helado, ¿si?

-Está bien- no estaba convencida- no diré nada.

-Gracias, mi amor pequeño- Louis besó a la niña en la frente- Entonces, ¿Qué quieren de comer?

-Pollo- gritó la pequeña.

-Pollo será- Se levantaron y Louis cargó a la pequeña escaleras abajo.
-

Así pasaron la tarde. Los tres juntos comiendo pollo, viendo películas y cantando cada canción que aparecía en las películas, hasta que la hora de dormir llegó.

Darcy quiso que sus dos papás la durmieran. Harry estaba en medio y Louis era la cuchara grande abrazando a sus dos amores.

Las despedidas cada vez se hacían más difíciles, pero ahora que Darcy lo sabía no habría excusa alguna para no verse a diario.

Louis dejó la casa después de muchos besos, abrazos y "te amos" por su parte. Llego a su casa sintiéndose el más afortunado del mundo. Por primera vez en mucho tiempo no sintió soledad al estar solo en su cama, pues su corazón ya estaba completo, relleno del amor de su ahora novio y su hija.

Lo que más quería en el mundo era estar con su familia. Despertar a lado de Harry todos los días, abrazar a Darcy y llenarla de besos. Tener desayunos juntos, ver películas, jugar con Simón, darle un hermanito y casarse con el amor de su vida.

Se durmió pensando en como sería su vida de ahora en delante. Era un sueño que se volvería realidad. Después de tanto sufrir, parecía que la suerte le sonreía. Por primera vez, amar significaba ser amado.

Hello pipol...

Espero les haya gustado el capítulo. Fue algo complicado de escribir porque era un tema sensible, pero creo que quedó muy bien.

Recuerden que no les doy capítulos de relleno, me disculpo por la tardanza.

He tenido algo de bloqueo, pero aquí seguiré, dándoles lo mejor de mi.

Los quiero mucho, gracias a ustedes ya van 11K ❤️

Me alegran la vida con sus mensajes, no dejen de comentar y lo que necesiten, mis mensajes están disponibles.

gg.❤️