CAPÍTULO EDITADO

Hailey

Tenía la casa sola, por que como Cole, estaba en Nueva York, y mis padres decidieron ir con él y yo no podía faltar gratuitamente a clase, pues soy la única pringada de mi familia en casa. Me hace gracia como ambos teniendo la misma edad, mis padres acaben por confiar más en mi que en Cole, de quien no se fiaban que estuviera solo por NY, sin embargo, a mi me dejan la casa al mando. Es genial.

¡Eso es lo que pasa cuando eres un inmaduro, Cole!

Y si, respecto a lo de Jake, han pasado ya casi dos semanas, he de admitir, que me pasé dos días enteros llorando con los chicos dejando que use sus camisetas de pañuelos, menos Bieber, a él no le he visto para nada más que el instituto, y no siquiera hemos hablado...

Sé que esperabais que ahora mismo estuviera me sentada en el sofá a ver El Diario de Noah o cosas del estilo, pero no. Me he dado cuenta que más que dolida, estaba enfadada, y todo ese enfado ha conseguido abandonar mi cuerpo en el momento, en el que reaccioné como deseaba haber reaccionado hace tres meses. Pero no, eso no quiere decir que quiera tener otra relación. Los chicos son un caos.

Y luego hablan de nosotras...

Cogí un puñado de M&M y me los metí en la boca, mientras veía Infiltrados en clase, es genial, no podía evitar reír, y eso que la había visto mil veces. Recién había empezado, y era la parte en la que el buenorro de Channing arrestaba a uno de los hombres que llevaban droga, y burlándose de el empezó a restregar su paquete por su culo. Me reí tanto que casi me atraganto con los M&M.

Si él está en el cuerpo policial y trata así a todos los delincuentes arrestados, yo me arriesgaría a ir a la cárcel.

Pervertida.

Mentira.

Seguí viendo la peli, cuando de repente sonó el timbre. Serán los cabrones de los chicos. Mira que les avisé que hoy tendría una tarde para mi, pero no. Me quedé de todas formas sentada, si no contesto en algún momento se irán, digo yo. Pero no, el timbre siguió sonando.

"¡No hay nadie!" Grité. Pero siguieron timbrando. Que pesados.

Rodé los ojos y con desgana paré la película, para después ir a abrir la puerta. Y me encontré a la persona que me esperaba.

¿Bieber?

No, peor, Jake.

Jadeé al ver lo herido que estaba su rostro. ¿Qué digo herido? ¡Si se parecía al mismo Rocky! Mi mano involuntariamente se elevó para tocar su rostro, pero a mitad de camino la detuve. Recordé que quien estaba enfrente mío, ya no era mi pareja, no tenía ningún derecho a preocuparme por el, ni aunque sepa que se merecía esto.

Suspiré.

"¿Que haces aquí?" No lo dije en un tono mordaz, sino neutral.

"¿Puedo pasar?" Sonrió con timidez."Quería hablar contigo."

Yo asentí y me hice a un lado para que pasara. Mientras veía como se sentaba en el sofá, esperando que yo fuera hasta el.

Cuando se dio cuenta que yo no le invité a sentarse, se disculpó.

"Lo siento, la costumbre..." Se puso de pie, de golpe.

Yo negué con la cabeza y sonreí un poquito restándole importancia, mientras sentaba al lado suyo. Ambos mirábamos hacia el televisor y un silencio incomodo de esos que tanto odiaba nos acompañaba.

"¿Infiltrados en clase, eh? Siempre te ha gustado." Se rió forzadamente. Y yo cansada resoplé y lo miré y saqué yo el tema, por que veia que el no sería capaz de hacerlo.

"Jake, ve al grano."

Él le miró, suspirando y pasó las manos por su pelo, para después señalar su cara bonita que ha quedado magullada.

"¿Todo esto?" Hizo una pausa." Me merecía aún más. Soy un capullo, por lo que te he hecho. De verdad, no sabes cuanto lo siento."

Lejos de enfadarme, como tenía planeado hacer para el día en que tuviéramos esta conversación (si es que la teníamos). Sonreí. Si, habéis leído bien, SONREÍ. ¿Y por que? Fácil, ya no me sentía enfadada con el, y sinceramente, estoy dispuesta a intentar perdonarle, no creo que sea tan fácil llegar a una amistad, pero lo podría intentar, me ha dolido mucho lo que me ha hecho, pero ya han sido bastantes tres meses llorando por cada rincón como para seguir durante más tiempo. Me quiero más que eso. Si no supo quererme y aprovecharme, que le den, no pienso llorar otra vez por esto, por alguien que no al final acabó por no valer la pena como novio.

"Si que has sido un capullo." Reí bajito, mientras le pegaba un puñetazo. El sorprendido me miró a la cara.

"¿Ya no estás enfadada?" Frunci el ceño con confusión.

"¿Querrías que lo estuviese?" Alcé las cejas con diversión.

"¡No!" Él se relajó notablemente."Yo solo quería explicarte todo y pedirte perdón aunque eso no vaya a solucionar nada." Bajó nuevamente la cabeza.

"Sinceramente, yo creo que te puedo perdonar, y puede que si las cosas van bien, volvamos a ser esos amigos que fuimos en un principio antes de salir." Vi el dolor en sus ojos, lo conozco, pero aún así sonrió con entusiasmo, y agarró con firmeza mis manos."¡Peeeero!" Levanté el dedo índice.

<< Creo, que te puedes ahorrar esos detalles sobre los cuales me dejaste, créeme, a ningún ex lo gustaría oír eso. >> Me reí, y el sorprendido, me acompañó.

"Lo siento, perdona, perdona. Entonces, ¿Intentarás perdonarme?" Me miró esperando, mientras estiraba su mano para que yo la estrechara.

Asentí, sonriendo con los labios apretados, mientras estrechaba su mano. ¡Ha sido aún más fácil de lo que pensaba!

"¿La vemos juntos?" Cabecee había el televisor, el asintió entusiasmado en respuesta. Con confianza, puso los pies sobre la mesa y cogió MIS M&M's, l'os cuales arrebaté de sus manos antes de que llegara a robarme ni un puñado."Ensucia mi mesa con tus pezuñas pero mis M&M's no los toques." Empecé a reír cuando el terminó la frase junto a mi.

Jake me conoce demasiado como para dejarlo ir de mi vida. Y no hay nada que me alegre más que haber actuado de una forma tan madura, respecto a este asunto.