Hooola nuevo cap!

Disfrútenlo ❤️

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Hay momentos en la vida que solo con una mirada basta para quedarse en silencio, no era la pregunta que debía hacer, sino simplemente quería escuchar tal vez, la respuesta de algo que ya sabía.

Eso era lo que decían sus ojos verdes, que no habría respuesta para algo tan obvio, que no preguntara porque era doloroso decirlo, que no lo afirmara porque tenía miedo.

La escuela volvió a abrir sus puertas después de dos semanas, Eren siempre se mantuvo a su lado, sonriendo y a veces perdiéndose en el mundo tan desconocido y lejano que era para él.
Nadie desapareció durante ese tiempo, la señora Fisher no volvió a molestar, los golpes en las puertas durante las noches ya no se oían. Fueron días tranquilos, en donde limpiababan e incluso se atrevieron a comenzar su propia huerta.
Los lunes iban a esperar al señor Robert, pero por más que pasaran horas desde temprano, solo se encontraban con las provisiones que se atrevieron a repartir.

Eren dormía abrazado a Levi durante las noches y aunque al principio el psi cólogo se sentía incómodo, pronto pudo entender que, sin su presencia y su calor, no podría estar tranquilo y conciliar el sueño. Se acostumbró tanto a su presencia durante su estadía, que comenzó a sentir que no habría nada más allá, si lo dejaba a ir. Y por eso, estaba dispuesto a buscar las respuestas necesarias, para llevarlo lejos de allí, sin que nadie pudiese lastimarlo.

—¿Levi?

Su sonrisa era tranquilizadora, lo miraba con calma mientras que desconcertado el contrario se dio cuenta de que ya estaban por entrar a la institución.

—¿Qué sucede?

—Ha estado muy distraído desde que salimos de casa ¿No se siente bien?

No, al contrario. Temía que el buen pasar se acabara ahora que las cosas parecían querer volver a la normalidad.

—Estoy bien, no te preocupes Eren.

Así fue como ambos se despidieron y cada uno se dirigió hacia sus respectivos lugares, los jóvenes que habían quedado para las sesiones fueron sin cancelar, Armin estaba bastante depresivo respecto a lo sucedido con Jean y Hoover fue para llorar la muerte de Reiner.
Él también comenzó a sentirse realmente mal después de las sesiones, porque era casi seguro de que ninguno de ellos hubiese sufrido la muerte, si la señora Fisher no hubiese llegado con él.

Fue también una sorpresa que la hermana que antes le había implorado poder conversar con él, se presentara temerosa a su puerta.

—Adelante.

La mujer se adentó con la cabeza baja, sin querer mirarlo, fue hacia la silla libre y se sentó, sin decir una palabra.

—Bien ¿en que puedo ayudarla hermana...?

—Sasha, gracias por recibirme señor Ackerman.

Levi asintió y se sentó a una distancia prudente, la observó, notando a la mujer sumamente nerviosa, sus manos estaban unidas y temblaban ligeramente.

—Debe detener al padre Smith—. Soltó de improviso.

—¿Disculpe?

Los ojos de la joven brillaron con temor, posados en los suyos que solo mostraban desconcierto.

—No debería decirle esto señor Ackerman, ya que he dado mi voto de silencio. Pero no puedo soportarlo más.

—Prosiga, no estoy entendiendo muy bien que es lo que tanto le aflije.

—El padre Smith nos mantiene aquí, a todos, por sus pecados debemos pagar lo que no hemos cometido—. Sus manos se soltaron y tomó las del contrario sobresaltándolo un poco - Las personas les temen a los forasteros por sus propias palabras, pero señor Ackerman, muy pocos saben que en realidad estábamos esperando que alguien como usted llegara a Fogtown. El señor Smith no lo dejará en paz, ni a usted, ni al Joven Jaeger.

—¿Qué está diciendo?

—Los niños que entraron al círculo, recuerde señor Ackerman, usted debe actuar antes de que sea demasiado tarde yo...

—Hermana Sasha, creí que estaría ayudando en el comedor.

Una voz grave e imponente se hizo presente en el pequeño lugar, Sasha separó sus manos completamente nerviosa y dirigió una sonrisa hacia el hombre que había irrumpido en tan mal momento.

—Espero señor Ackerman que no le esté incomodando.

—No, padre Smith. Solo quiso tener una pequeña consulta— respondió de inmediato.

Sasha se levantó de su asiento y se despidió rápidamente, cuando pasó al lado de Erwin, Levi notó sus hombros tensarse.

—No se preocupe señor Ackerman, pero para nuestras hermanas está el confesionario, seguramente usted no estaba enterado de ello, así que me disculpo por su impertinencia.

—No es molestia, se lo aseguro—. Contestó a la defensiva —¿En qué puedo ayudarlo?

Preguntó entonces después de soportar la mirada penetrante y fría que le iba dirigida.

—Vengo a saludarlo, ahora es uno de mis compañeros, además... el joven Jaeger no vendrá más a las sesiones con usted, él ha decidido que el confesionario es mejor para redimirse de sus pecados— quedó en silencio unos minutos y luego con voz tranquila continuó —Eren debe mantenerse alejado de los disturbios, y sé que con sus buenas intenciones ha dejado que él viviera a su lado, pero escuche señor Ackerman, la gente de este pueblo es muy supersticiosa y usted, al ser un forastero, solo aumenta el odio hacia el joven. Pienso que debería venir conmigo, yo le quitaría un gran peso de sus hombros.

—Es muy amable señor Smith, pero Eren lo ha decidido por si mismo. Si me disculpa debo atender a alguien más.

Smith le sonrió antes de dejar a Connie avanzar hacia el consultorio.

—Claro, no lo molestaré más, que tenga un buen día.