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Anécdota 77

Anécdota de @Ale_universe

Nos encontrábamos en un vuelo de doce horas. Llevábamos una hora a bordo y las cosas marchaban bien a decir verdad. Hasta que un dolor terrible me llenó el estómago; pensé que era una simple indigestión o algo por el estilo.

¡Pero no!

Así que fui al baño. Ahí me llevé una de esas sorpresas que incluso con los ojos cerrados te atormentan. Mi hado madrino Andrés había llegado. Casi podía imaginarlo irrumpiendo de una patada al cubículo del avión, con lentes de sol, bermudas, camisa floreada y uno de esos flotadores de niños alrededor de su cintura.

¿Por qué ahora, Andrés? ¿No podía haber sido al siguiente día?, que no estuviera a cuarenta mil pies de altura.

En fin, entre mis armas estaban: haber leído Oh, Andrés y La Doncella de Rojo. El detalle de mi situación: no traía toallas ni nada que se le pareciera. En un arranque desesperado, acudí a mi mamá. La peor idea que he tenido.

—Oye, ma...

—¿Qué pasó?

—Ya me bajo —musité inclinándome hacia ella.

—¿Qué es eso? —sacó la mirada de una revista para verme — Habla bien, hija.

—Tengo la regla, marea roja, Andrés. Menstruación —respondí al borde de mis fuerzas.

—¡¿Te llegó la regla?! —rugió.

Mi señora madre gritó tan fuerte que todas las cabezas cercanas se vieron atraídas a nosotras. Para ese punto yo ya estaba sonrojada. Sé que es algo totalmente natural, pero que todo un avión lleno de extraños se enterara, no era una experiencia por la que desease pasar.

Mi mamá me tendió una toalla sin más, de modo que la cogí y me incorporé para volver al baño. Iba a mitad de camino por el pasillo, cuando un grito me detuvo.

—¡Hija, la parte delantera es la que tiene el corazón!

Que no me hable a mí, que no me hable a mí, Dios mío.

—¡Y por favor, asegúrate de no colocar la parte adhesiva en tu vagina!

Hice un esfuerzo por no tirarme en posición fetal a medio pasillo; asentí sin mirarla, y, tiesa de la vergüenza, me fui a terminar lo que había comenzado.

Sólo les puedo decir que cuando descendí del avión, los pilotos y las azafatas me felicitaron. 

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