𝗖𝗵𝗮𝗽𝘁𝗲𝗿 𝗘𝗹𝗲𝘃𝗲𝗻🦌
𝑽𝒐𝒕𝒆𝒏 𝒚 𝒄𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆𝒏. 𝑷𝒐𝒓 𝒇𝒂𝒗𝒐𝒓, 𝒆𝒗𝒊𝒕𝒆𝒎𝒐𝒔 𝒔𝒆𝒓 𝒍𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒇𝒂𝒏𝒕𝒂𝒔𝒎𝒂𝒔
⚝──⭒─⭑─⭒──⚝
El camino a las mazmorras, siempre era tedioso para Rose Mary. Sabía que era vigilada constantemente por su hermano. Más que todo a petición de su padre. Anthony no era mal chico, solo un poco terco en algunas ocasiones.
Las lechuzas con el sello de su familia, iban y venían de forma privada entre su hermano y sus padres. Comentando sus avances en clases y su relación social con los demás miembros de la casa de Slytherin.
Rose Mary había hecho buenas migas con dos chicas que eran miembros fijas del grupo del chico Crouch y el heredero Black. Dorcas Meadowes y Pandora Rosier. La rubia era de Ravenclaw, pero con su primo casi hermano en Slytherin, pasaba mucho tiempo con las serpientes. Era al parecer la mejor amiga de Regulus.
Para Rose Mary, la relación de amistad que tenían esos dos, le parecía muy bonita. Pues él la cuidaba bastante, y ella lo protegía a su manera un tanto peculiar.
Meadowes era literalmente la contraparte mujer de Crouch. Dónde ambos se divertían a su manera extraña y bastante curiosa. Si llegabas a tocar una fibra que no deberías en esos dos seres. Podrías arrepentirte.
Eran un grupo bastante curioso, y la esperaban siempre en la entrada de la sala común. Desde la primera noche en la que Dorcas la observó salir de la sala por haber tenido frío. La primera noche en la que convivió con James Potter.
James Potter.
¿Cómo clasificaría Rose Mary a ese chico?
Bueno, sin duda era un bromista nato, bastante peculiar, tenía el cabello enredado o simulando estar enredado todo el tiempo y en todas las direcciones. Sus ojos almendrados estaban ocultos detrás de unas gafas redondas de bastante aumento, tal parecía. Porque las veces que la chica lo vió sin sus gafas, este parecía no poder ver nada hasta que literalmente besaba lo que sea que buscaba enfocar.
Era bastante atlético, no podía negarlo y le hacía reír. Rose sabía que los Potter eran una familia que no seguían al 100% las leyes sangrepuristas de la sociedad mágica. Siendo tildados de traidores de la sangre. Pero a ellos no les importaba. Solo disfrutaban de estar juntos en familia. Más cuando Sirius Black se unió a ellos.
O eso le decía Peter, cuándo le preguntó distraídamente un día. Sobre cómo era la familia de James.
El merodeador no tuvo problemas en contarle sobre los amables padres del muchacho y de los veranos que vivían el grupo de cuatro chicos en aquella casa. A Rose Mary le llamaba mucho la atención. Le parecía un tanto dulce y divertido.
Al llegar a la pared dónde se suponía que estaba la sala común. Se encontró con su hermano justo frente al muro, impidiéndole el paso.
—Ah, Rose. Querida. ¿Qué tal la noche? —Se acercó a ella con una sonrisa, pasando su brazo por el hombro de la chica, para dar la vuelta y caminar lejos de las mazmorras.
—Anthony. ¿Por qué no estás dentro de la sala común? Creía que Mulciber estaría aún gritando por la pérdida.
Él negó, chasqueando la lengua con disgusto.
—Mulciber es un tipo. Que me agota, no me agrada ni le presto atención. Ya sabes.
Caminaron un rato hasta llegar a lo que parecían ser los invernaderos. Él abrió la puerta de uno y ella pasó en silencio, tomando asiento en una de las bancas; mientras él se sentaba frente a ella.
—Y dime hermanita. ¿Qué tal la visita a la torre de astronomía con Potter? —Ella bajó la cabeza a sus manos. Moviendo sus dedos disgustada por el tono que utilizaba su hermano.—Vamos dime. Debes saber algo interesante de él. ¿O no?
—Anthony. Te dije que no quiero hacer esto. ¿Cómo supiste dónde estaba?
—A veces pienso, que crees que soy estúpido.
—Como sea. Te dije que no haré nada contra James.
Él resopló, llevando su mano a su cabeza y dándose pequeñas palmadas como si buscara sacar algo de su oído, una acción que repetía cuándo quería hacerse el sordo o se le metía agua del lago que tenían en asa; dentro de los oídos.
—Ya, perdón. No te escuché. La bludger que los imbéciles de los Prewett me lanzaron en el partido, me afectó. No te escuché.
—¡Lee mis labios entonces Tony! ¡No lo haré! ¡No sé nada!. Pídele a alguien más que haga tu estúpido trabajo de espiar a Potter. No vine aquí para que me des órdenes.
Anthony rodó los ojos y levantó las manos en señal de rendición. Suspirando levemente antes de volver a dirigirse a su hermana.
-—Rosie, Rosie, Rosie. Creo que olvidas algo cielo. Un detalle pequeño, muy pequeñito. Pero también importante. —El castaño se puso de pie y tomó fuertemente los hombros de su hermana, sacudiendola en el proceso. —¡Soy tu hermano mayor y debes obedecerme!
Los ojos azules de Rose Mary se llenaron de lágrimas. Odiaba cuando su hermano se comportaba de aquella forma tan prepotente. Lo había visto en la mansión de su familia. La forma de actuar como un niño mimado mientras que ella debía estar postrada en cama con los medimagos y enfermeras cuestionando siempre su salud.
Eran mellizos, claro. Pero los cuatro minutos que los separaban, eran suficientes para Anthony como para creerse superior a su hermana y abogar de ese privilegio y darle órdenes como si nada.
A Rose Mary le dolía ver a su su hermano convertirse en un patán. Pues lo adoraba como a nadie en el mundo. Fue su primer amigo y compañero de juegos cuando podía salir al jardín los cortos lapsos de tiempo antes de tomar sus medicinas y volver a recluirse en su habitación. Pero la idea de Anthony a Hogwarts, lo había cambiado.
Mientras los hermanos Yaxley discutían en el invernadero, alguien se acercaba algo tambaleante por el corredor, sosteniéndose de la pared para intentar no vomitar, de todo el alcohol que había consumido.
-—Joder. Siento que me saldrá una segunda cabeza.—Masculló apoyándose en un muro.— Prongs me debe una grande por haberme hecho enojar. Pff. Si claro, el niño bonito de los Black de nuevo. Para eso tienen a Regulus.
Sirius Black, quién mareado, había escapado de su sala común en busca de algo de aire fresco y comida; había terminado cerca de los invernaderos dónde séptimo veía clases de herbología. Eran algo más apartados que los de otros años, pues las plantas que se presentaban y cuidaban allí, servían mayormente como ingredientes delicados de pociones.
Al sentarse en el suelo, logró llamar su atención los gritos de un chico, al otro lado. Giró su rostro y se arrastró levemente para acercarse a escuchar. Ya que sin la capa de invisibilidad de James. Tenía que ser cauteloso.
—¡Rose Mary! ¡Si yo te digo, canta. Tú dices claro hermanito! ¡Te paras frente al público y armas un show!
El Black notó por la voz y la mención del nombre de la chica, que eran los dos mellizos de Slytherin. El castaño bastardo que le caía mal, y la pelirroja que tenía engatuzado a su mejor amigo.
—¿Qué mierda?.—Se acercó más para escuchar, observando como Anthony caminaba de un lado a otro con enojo.
—¡Si yo digo, que quiero que vayas y destruyas a Potter! ¿Qué debes decir?
La chica bajó la mirada.
-—¿Lo quieres en bandeja de plata o rápido con una tortura?
El murmullo de Rose Mary fue repetido a orden de su hermano, un poco más alto y que a favor de Sirius, pudo escuchar. Cubriéndose la boca sorprendido por sus palabras.
«Yaxley va a por James. ¡Joder quiere matarlo!» Pensaba el ojigris. «Debo regresar a la sala común y decirle a Moony.»
Arrastrándose nuevamente, salió del lugar dejando a los dos hermanos enfrascados en su discusión.
—Hermanita. ¿No ves que me preocupo por ti?.—Su mano reposó en el hombro de la pelirroja; quién se sacudió con notable molestia.
Anthony hizo una mueca de disgusto por su actitud. Limpiando su mano en su túnica.
—No pienso ayudarte en nada Anthony. Me parece que estás cayendo muy bajo con esto. —Masculló ella.
Ambos se observaron, antes que él asintiera.
—Quizás tienes razón. ¿Pero sabes que estás olvidado? Que yo tengo el poder se hacer que esa libertad que tanto deseabas. Sea removida. Una carta a papá y adiós Rose Mary. Te extrañaremos aquí en Hogwarts. —Ella lo observó furiosa. —¡Ay, por favor! No sé porqué te tienes que desvivir por un tonto.
—¡El es diferente! ¡Diferente a ti! ¡Diferente a todos esos chicos con quién padre quiere llegar a comprometerme saliendo de aquí! -Se defendió la pelirroja.—Ha sido amable, honesto, gracioso. ¡Jamás me haría daño!
—¡Hizo una maldita broma para humillarme!
—¡Fuiste un completo estúpido! ¡Y se disculpó conmigo en nuestro nombre!
Anthony tiró de su cabello y negó.
—Es un tonto hermanita. Es un hombre. ¿Qué te da la sensación que serás diferente para él? —Ella guardó silencio. —Un día, logrará robar tu corazón y te dejará.
—Potter no me gusta, Anthony.
—¿No? ¿Por qué dices que es diferente y lo defiendes, entonces?
Rose Mary se quedó sin palabras. James no le gustaba...Bueno, no estaba segura. Había visto en primera instancia el beso que aquella pelirroja le había dado al de Gryffindor y cómo todos los animaban. ¿Qué le decía que la querría a ella?
Anthony viendo a su hermana dudar, sostuvo sus manos buscando que levantara la mirada.
—Es un Gryffindor. Es hombre. Buscará la fama y la fortuna de formas que salga bien parado y con muchos aplaudiendo sus gracias. ¿Dónde quedamos nosotros, Rosie? Eres una serpiente. Para el mundo, eres malvada.
—Yo no soy mala, Tony.
—Lo sé cariño. Pero convence al resto que no lo eres. Anda; te dejo hacerlo. Tu hermanito siempre estará para levantarte cuando veas que no te querrán jamás. No confiaran nunca en ti.
Sus palabras dolían. Era consciente de que buscaba que se rindiera y aceptara el hacerle daño a James. Pero ella no quería.
Se soltó del agarre de su hermano con furia y le dió la espalda. El chico soltó una carcajada.
—Bien. Adelante hermanita. La noche es tuya. Ya te dije que hacer; tú verás que tengo razón. —Y se marchó. Dejándola sola con unas lágrimas cayendo por sus mejillas.
Al otro lado del castillo. Azotando la puerta de su habitación para despertar a sus dos amigos. Sirius Black entraba agitado, para terminar siendo sostenido por Remus y llevado a sentarse en su cama.
—Pads. ¿Qué pasa?
—¿Siri, de dónde vienes?
El ojigris levantó la vista cuando logró normalizar su respiración y habló.
—Estuve en los invernaderos. Revisa el mapa Pet. Los Yaxley quieren hacerle daño a James.
El merodeador más pequeño no lo creía, así que observó a su amigo licántropo, que señaló con la vista el mapa.
Al abrirlo y buscar el nombre de los mellizos, se encontró con que era cierto. Saliendo de uno de los invernaderos, iba adornado "Anthony Yaxley" y quedándose dentro del mismo. "Rose Mary Yaxley"
«Esto no puede ser verdad.» Peter se negaba a creerlo. Pero la voz de Sirius era firme.
—Debemos advertir a James.
𝑽𝒐𝒕𝒆𝒏 𝒚 𝒄𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆𝒏. 𝑷𝒐𝒓 𝒇𝒂𝒗𝒐𝒓, 𝒆𝒗𝒊𝒕𝒆𝒎𝒐𝒔 𝒔𝒆𝒓 𝒍𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒇𝒂𝒏𝒕𝒂𝒔𝒎𝒂𝒔
⚝──⭒─⭑─⭒──⚝
¡Avance especial del capítulo!
En TIKTOK había dejado el spoiler de este episodio que me ha gustado escribir.
Sirius por chismoso, va a armar un gran revuelo.
¿Será capaz Rose Mary de desafiar a su hermano? ¿Será que mintió al decir que no gustaba de James?
Es curioso.
En fin. Para interactuar más con la historia. No olviden votar y comentar. Si este capítulo llega a veinte comentarios antes del lunes. Subiré el capítulo 12 y 13.
Nos vemos luego ☀️
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