─¿¡Qué!?─ se apresuró a abrir la puerta y el beta contuvo una sonrisa.

─No lo se, veníamos de camino y él sólo se desmayó─ actuar se le daba bastante bien aunque por dentro muriera de risa.

Jeon pasó y lo dejó sobre el sofá mientras el mayor de los tres miraba al más bajo con preocupación y se acercó para ver qué era lo que tenía.

─Kookie me dijo que tenía algo extraño y se desmayaba de la nada por falta de aire, no se algo raro de gammas creo que deberías... ya sabes─ el castaño le miró confundido. ─Respiración de boca a boca... tal vez ayudé─ susurro.

─Pero...-─ interrumpe.

─¡Pero nada! Míralo está inconsciente ¡Date prisa!─ el delta rápidamente se acercó a su rostro para darle respiración de boca a boca.

Su sorpresa fue tal cuando el pelinegro abrió los ojos con un sonrojo y evitó que éste se separara atrayéndolo del cuello para besarlo.

Sus ojos abiertos a más no poder observaban al de sus mejillas rojas y ojos cerrados mientras entrelazaba sus labios con los de él.

─Esta foto la guardo en favoritas─ chillo feliz interrumpiendo el beso.

─Lo siento...─ susurró una vez sus labios se separaron.

─¿E-estas bien?─ apenas pudo hablar, literalmente el chico le robó el aliento.

─De nada─ sonrió el beta llamando la atención de ambos. ─Iré a comprar comida, se me cuidan─ y salió por la puerta.

─JiMin me dijo que lo hiciera─ susurró desviando la mirada intensa que se posaba en el.

─Ahora tendré que quedarme yo en la habitación─ susurró apenado.

─Lo noté─ sonrió avergonzado. ─¿Puedes dejar de verme así por favor? Tus ojos...─ el delta apartó la mirada.

─Déjame intentar, desde pequeños me gustabas y entiendo si ya no te gustó pero déjame intentar─ el más bajo asintió.

─Tu olor me marea─ contestó en un susurro. ─Quiero que me beses─ pidió de igual forma, seguía sin apartar sus brazos que rodeaban el cuello del más alto.

─Es tu lobo─ negó con la cabeza.

─Soy yo, mírame a los ojos─ intentó buscar su mirada.

─No creo que...─ sus ojos con un intenso brillo dorado se cruzaron con los de el menor. ─Eres tú─ acaricio su mejilla, ése brillo gris no estaba.

El pelinegro se estremecía ante la mirada intensa de su alfa, para él era un alfa aunque fuera un delta; se acercó suavemente a él para unir sus labios de nuevo en un suave y cariñoso beso que poco a poco se convirtió en uno más subido de tono.

Sin interrumpir el beso, se levantó del sofá y dejó al mayor sentado en éste y él a horcajadas de su regazo, acariciaba su cabello durante el beso pero lo detuvo al ver que el castaño no reaccionaba estaba casi como estatua sólo correspondiendo al beso.

─Tienes manos, úsalas─ se quejó llevando las manos de su alfa a su espalda baja.

─¿Q-quieres que t-te toque?─ susurró avergonzado sin apartar sus manos Tenía bastante autocontrol pero el menor lo estaba por hacer perder todo ese autocontrol.

─Hazlo, te estoy dando permiso─ susurró cerca de su oído dejando besos por su cuello.

El mayor con sus manos recorrió su espalda mientras leves jadeos escapaban de sus labios por las lamidas y mordidas que el pelinegro le proporcionaba en su cuello.

El menor sonrió complacido al sentir un bulto de buen tamaño rozar con su trasero pero ¿de verdad lo haría? JiMin no tardaría en llegar.. pero ahora no pensaba con claridad, estaba excitado.

Pararon al escuchar el ruido del teléfono de HoSeok, era JiMin, con un suspiró tomó la llamada.