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𝗖𝗔𝗣𝗜𝗧𝗨𝗟𝗢 𝟴:
𝗛𝗢𝗚𝗦𝗠𝗘𝗔𝗗𝗘
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El sábado antes de la primera prueba dieron permiso a todos los alumnos de tercero en adelante para que visitaran el pueblo de Hogsmeade. Hermione, Queenie y yo estábamos más que emocionadas de salir. Me encanta Hogsmeade.

- entonces ¿como te fue en la entrevista? - me pregunta Hermione mientras tomamos asiento de una vez por todas. - ¿pondrán tu nombre en el artículo?

- pues, estuvo bien. Solo entrevisté a Cedric Diggory y a Víctor Krum. - levanté ambos hombros. - y no se si pondrán mi nombre... realmente a como dijo esa mujer, era solo como una cosa de una vez. No se repetiría. Pero no me arrepiento, esto es mi primer acercamiento a la escritura. En verdad.

- aparte que hablaste con Cedric Diggory. - suspira como si hablara de alguien que en verdad le gusta mucho.

- ¿has hablado con Cedric? - se acerca una chica de Gryffindor. Cabello rizado y largo.

- solo lo entrevistó, Lavender. - le dice Hermione.

- es muy lindo. - dice Cho Chang, una vez que también se acerca a la conversación. ¿Que ahora a todas les interesa hablar de Cedric? - y muy amable.

- cierto, Cho y Cedric tienen conexión. - agrega Queenie. Supongo que lo dice para ver que podía sacar de Harry. - los he visto varias veces hablando.

- solo somos amigos. - empieza a jugar con su cabello.

- si bueno, solo fue eso. - pareciera que todos se acercaban en círculo a la conversación. Se entiende, ya que muchas personas cuando salimos se quedan sin que hacer. Aunque no entiendo como eso es posible cuando hay tanto que hacer fuera de Hogwarts. Ahora los chicos venían. Pero agradezco que solo los que me importan. Ron, Harry, Fred y George.

- hola Cho. - Harry saluda nerviosa a nuestra compañera.

- hola. - Ella también le dice en un tono de voz como si también le dieran nervios al hablar con el.

- ¿no quieren ir a hacer algo? - Fred me dice mientras se sienta a un lado mío y empieza a peinar de mi cabello.

- ¿como que? - pregunté.

- algo más interesante que solo estar todos aquí sentados sin hacer nada. - agrega George.

- hola. - Cedric se muestra enfrente nuestro y las reacciones eran de esperarse. Todas las chicas, incluyendo a Hermione, hicieron alguna clase de ruido cuando este se presentó. Los chicos no. Solo Potter, quien si lo saludó bien. Ron parecía odiarlo por alguna razón así que no dijo nada.

- hola. - le dice Lavender. - felicidades por ser elegido.

- Gracias. - este sonríe. - ¿que hacen?

- no mucho. - contesta Hermione mientras me da un codazo para que hable con el. - ¿verdad Charlie?

- es cierto. - dije riendo.

- quizá hacíamos algo. - Fred dice. Suelta mi cabello y ahora abraza de mis hombros. - estábamos  viendo todos si si hacíamos algo.

- ¿Quisieras ir a tomar una cerveza de mantequilla a Las Tres Escobas? Hace un poco de frío, ¿no?- como no dijo ningún nombre en específico, no dije nada, pero todas y todos me miraban esperando ver que es lo que contestaba.

- ¿yo? - era cierto cuando decía que no sabía si me decía a mi. El asiente. - Si, por supuesto.

- ¿está bien? - le pregunta a Fred. El me suelta y tan solo se levanta de su asiento. Yo hago lo mismo, para irme con Cedric. Fred solo asiente y se me queda mirando pero esta vez sin sonrisa en su rostro. - bien.

- ahorita los veo. - salude a todos a lo lejos y Hermione y Queenie no dejaban de sonreírme y emocionarme por mi. Las otras chicas bueno, no dijeron nada.

- ¡se amable con ella Diggory! - ambos volteamos y vemos que fue Fred quien gritó eso. Lo miré molesta.

- ¿de acuerdo...? - Cedric le grita y seguimos caminando. - que protectores tus amigos.

- lo sé. Ignora eso.

- deja te abro la puerta. - entré al lugar y el detrás mío. - no quisiera que me golpeases con ella o algo por el estilo.

- prometo no volver a golpearte o romper tu ropa. - me reí.

La taberna Las Tres Escobas estaba abarrotada de gente, en especial de alumnos de Hogwarts que disfrutaban de su tarde libre. Tomamos asiento en una de las mesas cerca de la ventana y mientras Cedric nos pedía de tomar, veía como Fred, George y Vivian entraban al lugar. Se sentaron unas mesas adelante. Mi hermana me sonreía, quizá porque estaba feliz de verme con alguien que no fuese Queenie. Pero Fred y George tan solo miraban sin ninguna expresión. George miraba a Cedric, quizá siendo algo sobre protector y Fred solo me miraba a mi, lo cual me incomodaba. Le saqué la lengua jugando y este tan solo sonríe, pero muy a fuerzas.

- muchas Gracias. - le dije mentiras me quitaba mi chamarra. - por las bebidas.

- no es nada. En verdad. - jamás había pensado que terminaría hablando más con el, con todo lo que ha pasado. Pero no me quejo, el sujeto me agrada. Y mucho. Y no lo negaré, en verdad es guapo. - ¿que era lo que tenían planeado hacer? ¿No te arruine un plan verdad? - en ese momento, la linda Evie entra al lugar y corre a abrazar a Fred. Incómodo. Decidí dejar de verlos.

- no... no tenía nada que hacer. - detesto esto. Ahora me ha agüitado el día.

- tu amigo Weasley dijo que si.

- si bueno, ellos ya están pasándola bien. - dije mientras de nuevo los miraba. Es más incómodo aún ya que Fred me vio verlos juntos. Llegaron nuestras cervezas de mantequilla así que tomé rápido la mía para probarla. - que delicia.

- lo sé. Me encanta venir aquí. - olvidó que es mayor que yo. Yo llevo solo un año escolar viniendo aquí. El más. - aunque nunca había venido con una chica. - ríe nervioso.

- bueno, yo si. - reí. - con mis amigas. - fue inevitable seguir volteando a verlos, detesto que hayan entrado aquí. Es mas, el que se sentaran enfrente. Aunque yo no era la única volteando, de repente ya sea Fred o George, volteaban a verme. - pero con un chico así solos, no. Así que... gracias por la invitación.

- no, literalmente no fue nada. - pero que lindo. En verdad es guapo, ahora entiendo a todas las chicas. - pero siempre he pensado que las cosas no pasan solo porque si.

- ¿a que te refieres? - se queda viendo su bebida.

- si bueno, me has atacado dos veces. - me tapé el rostro algo apenada. - y terminaste haciendo mi entrevista.

- así es.

- aun y cuando fueron cosas extrañas para que me pasaran, me gustaba. Porque te ponías toda apenada y sonrojada.

- ¿te gustaba verme sufrir? - le dije mientras le empujaba el brazo. Claro, todo en broma.

- no pero, luces muy tierna cuando te sientes mal. - sonreí ante ese comentario. - pero eso no es motivo para que vuelvas a romperme otro suéter ¿de acuerdo? puedes verte tierna haciendo otras cosas.

- estoy de acuerdo con eso. - y fue ahí cuando recordé que la próxima semana sería el torneo. - ¿estas emocionado?

- eso ya lo sabes. - lo dice por lo que pude sacar de información en la entrevista de ayer. - pero si, un poco.

- ha de ser increíble ser una persona tan reconocida en Hogwarts. - digo, ya lo era antes, por ser atractivo.

- pues, no escribí mi nombre en el pergamino para ser reconocido, tan solo creí que podría ser interesante. Y que podría poner a mi padre orgulloso.

- te deseo la mejor de las suertes. - dije mientras levantaba del tarro y el hizo lo mismo para chocarlos y brindar.

- ¿iras a verme a las pruebas? - su sonrisa. De verdad me ponía nerviosa.

- por supuesto. - aparte de que también vería a Harry. - cuenta conmigo.

- hola. - aparece Vivian enfrente nuestro, parece que ya se van. - hola Cedric.

- oh, ella es mi hermana. - aunque olvide que si se reconocen el uno al otro. - ¿ya te vas?

- si... Evie quiere ir a comprar unos dulces. Nosotros ya habíamos ido antes pero, pues ahora la llevaremos.

- de acuerdo. - llegan Fred y George y claro, Evie. - hola Evie.

- hola. - me da un abrazo. - hola Cedric.

- hola . - este la saluda. - suerte comprando dulces.

- gracias, ustedes suerte en su cita. - dice Evie muy emocionada.

- no es una cita. - decimos Fred y yo al mismo tiempo. ¿disculpa?

- de acuerdo... nos vamos. - Vivian notó lo incomodo que fue eso y salió del lugar.

- hasta luego Lottie. Adios Cedric. - George nos dice con una amplia sonrisa en su rostro.

- adios. - dice el.

- Adios. - Fred deja sobre la mesa una varita de regaliz y se va. Me sentí medio feliz de saber que me había comprado una, aunque la felicidad se fue cuando vi que se iba agarrado de la mano de Evie. Cada vez era mas oficial.

- ¿es para ti? - Cedric me la entrega.

- son mis dulces favoritos. - el asiente. Parecía ahora el el incomodo. - ¿los has probado?

- no.

- ¿que? hazlo. - se lo entregué. - vamos.

- solo por ti. - eso fue lindo.