Decir que Jungkook no estaba nervioso sería una gran mentira, era un manojo de nervios, se sentía ansioso y también un poco triste.

No es como si ver a la mujer que te dió la vida, a la que no has visto por casi dos meses, en un estado deplorable cuando ella normalmente es una mujer arreglada y preciosa, no pudiera hacerlo sentir triste.

Ambos se miraban fijamente uno frente al otro, tenían tanto por decir, pero sus bocas no articulaban palabra alguna.

Como si el hecho de verse ya fuera algo bastante grato para los dos, aún así necesitaban más que una mirada para poder sacar lo que ambos tenían en el pecho.

—Yo... Bueno —Juyeon suspiro antes de continuar —Yo acepto que estuve mal, independientemente de la situación, Jamás debi golpearte en primer lugar ni decirte esas cosas.

Jungkook sentía el nudo en su garganta mientras Taehyung tomaba su mano por debajo de la mesa.

—Quiero que sepan que actúe impulsiva por la impresión, nunca hubiese actuado así si me lo hubieran dicho antes...

—¿Crees que si te lo hubiera dicho tu reacción hubiera sido diferente? —preguntó Taehyung tratando de comprender las palabras de la mujer.

—Me hubiera enojado, si, pero no hubiera sido un golpe tan duro para mí.

Jungkook bajo su mirada con vergüenza.

—Aún así, quiero que sepan que... no hare nada en sus contras, tú eres mi hijo y debo apoyarte en cada paso que des, porque aún que no lo diga, estoy muy orgullosa de ti y... lamento tanto haberte dicho esas palabras, quiero que sepas que fueron pronunciadas desde lo más profundo de mi enojo yo... yo jamás pensaría eso...

—Mamá no tienes que hacer esto, no... yo estuve mal si alguien debe pedir perdón soy yo...

—No hay nada que perdonar Jungkook, lo que pasó ya pasó, nuestra relación ya no era la misma y lo entiendo, también me costó aceptar que en realidad yo no era el problema, simplemente él ya tenia los ojos en alguien más... En ti.

Jungkook levanto la mirada y ambos se miraron con lágrimas en ellos, las inmensas ganas que tenían de abrazarse y consolarse eran tan profundas, pero aún había esa barrera ahí en medio de ellos y estaban seguros de que se quedaría ahí por un tiempo prolongado por lo menos hasta que sus corazones estuvieran realmente sanos.

—También quiero que sepan que... no me opondre a su relación, sin embargo... Quisiera que Jungkook volviera a casa, no es que quiera separarlos, solo creo que deberían ir por pasos y empezar a vivir juntos es un gran paso que puede llevar su relación al fracaso.

Cómo les pasó a ellos...

Jungkook asintió mirando a Taehyung quien le sonrió, ambos estaban de acuerdo en aquello.

Lo mejor era ir poco a poco y no apresurar las cosas, después de todo, ambos estaban seguros de querer estar juntos y lo que fuera necesario para lograrlo, lo harían sin dudar.

—Bueno yo... —Juyeon tomo su cartera y se levantó de la silla —Ya me iré, es todo lo que debía decir... Eh te espero en casa...

—Gracias mamá... —Murmuro haciendo que los pasos de la mujer se detuvieran, la misma que volteo a mirarlo con su corazon latiendo bastante rápido —y perdóname, te juro que nunca quise dañarte, trabajare muy duro para ganarme tu confianza una vez más, para que podamos ser felices y sonreír como siempre, solo espero que puedas perdonarme.

Juyeon sonrió y asintió, aquella sonrisa había sido suficiente, había esperanzas de que todo mejorará.

Por eso cuando por fin se fue dejándolos a ambos sumergidos en un silencio tomados de la mano, se permitieron respirar y levantarse para irse.

Lo que era un almuerzo se convirtió en solo una plática, lo menos que tenían era hambre.

Caminando por las calles tomados de la mano con una sonrisa en sus rostros.

Tenían un largo camino por delante, a pesar de que todo había empezado de una manera no favorable, ahora se sentían bien, como si el mayor peso de su relación se hubiera disipado y ahora podrían vivir su relación en paz.

Sin ocultarse. Sin negarse.

Solo queriéndose cada día más con fuerza y precisión.

—¿A dónde vamos?

—Te llevaré al estudio

—¿Me tatuaras?

—Estoy ansioso por tintar esa flor en tu espalda.

Jungkook sonrió y balanceo sus manos enlazadas de atrás hacia adelante.

Una vez su padre le dijo que el corazón no se fijaba de quien enamorarse.

Había tenido razón.

Porque no podía estar más enamorado de ese hombre.

Ese hombre que le robó el corazón y el alma como nunca antes lo habían hecho.

Estaba tan feliz y complacido con que al final todo terminará de la mejor manera.

Aun que era obvio que el inició de una relación no siempre sería todo de color de rosa.

Habrían altas y bajas.

Pero todo se puede cuando las cosas se resuelven juntos...

Siempre juntos...

[...]

El tiempo hizo de las suyas, la vida de ambos cambio y dió giros inesperados a decir verdad bastante giros inesperados.

Decir que la relación de Jungkook con su madre mejoro de la noche a la mañana sería mentir.

Fueron días e incluso meses de indiferencia y corazones heridos, a pesar de eso no hay mejor cura para un corazón herido que el tiempo.

Con los meses la relación mejoro aparentemente e incluso podían cenar los tres sin sentir esa incomodidad o que la mujer se retirará antes de tiempo.

Habían superado aquello.

Sobre todo por cierto hombre que había llegado a su vida inesperadamente, ayudándola en sus momentos más vulnerables, un hombre que la hizo ver qué nada de lo había pasado realmente habia sido culpa de ella, pero que no la juzgaba por haberlos perdonado.

Jungkook era su único hijo, y ninguna persona podía separarlos, ni siquiera un hombre.

Por eso acepto por fin que Taehyung nunca fue el hombre para ella, la madurez y responsabilidad de este nuevo inquilino en su corazón le hicieron darse cuenta de ello, y no es que Taehyung estuviera mal, para nada...

Simplemente estaban en una distinta sintonía, sus vidas no iban por el mismo curso.

Sin embargo sabía que Taehyung era un buen hombre y estaba contenta de saber que su hijo estaría en buenas manos, por lo menos sabría que así sería.

Por otro lado Jungkook consiguió el título y certificación como bailarín profesional. Fue bastante emocionante para él ver a su madre rehacer su vida al lado de un hombre que la queria.

Ahora, aparte de bailar en musicales famosos y conseguir papeles emblematicos y protagónicos, ganandose el reconocimiento de ser uno de los mejores bailarines en Seúl, también era instructor en un salón de danzas para adolescentes.

Era un profesor desastroso, pero le llenaba el corazón ver a sus chicos ganar medallas y reconocimientos.

Era todo lo que quería.

Cuando pensó que estaba lo suficientemente listo y al ver a su madre vivir con su actual pareja, decidió darles su espacio e irse a vivir con su novio.

Taehyung era el ser más feliz del mundo, su Gimnasio ya contaba con una sucursal en Busán gracias a la insistencia de su suegro, ya que así los vería más cuando tuvieran que atender aquel negocio, una excusa tonta si, pero sin duda había funcionado.

El padre de Jungkook por fin era un hombre libre en cuanto al matrimonio con Juyeon, ahora estaba a la espera de su segundo hijo.

Una niña...

Con una mujer que lo quería con todo su corazón.

Volviendo a la historia de aquellos dos seres por los que estamos aquí.

Todo parecía bastante bien, todo era perfecto hasta que ese día Jungkook parecía más sentimental de lo que ya era al ver un cachorro metido en una caja en uno de los callejones cerca del edificio donde vivía con su novio.

Su corazón era muy sensible cuando se trataba de pequeños animalitos indefensos, aún más cuando los veía abandonados y en mal estado.

Justo como ese cachorro.

Por eso tomo la caja en sus brazos y lo cubrió con su chaqueta.

—¡Amor ya llegué!

—¡Estoy en la cocina cielo!

Muy bien, Jungkook no pasa nada, solo debes decirle que lo adoptaste, que te pareció tierno y que si no lo acepta los dejaras sin sexo.

Dejo al cachorro fuera de la caja en la sala y fue directamente a la cocina, encontrando a su novio de espalda cocinando quien sabe que, se acercó y lo abrazo dejando besitos en su espalda.

—Que rico huele ¿Que es?

—Un nuevo perfume.

—La comida Taehyung...

Ambos rieron y el mayor se dió la vuelta para besar a su novio, solo que algo no pudo pasar desapercibido por sus ojos.

Al besar a su novio sintió algo moverse detrás de Jungkook así que miro rápidamente en medio del beso y se encontró con un... ¿Perro?

Se separó de los labios de Jungkook sin quitar la mirada del animalito, Jungkook se percató e inmediatamente volteo para ver qué estaba viendo.

Cuando sus ojos divisaron al cachorro sonrió con nervios, al parecer lo había seguido a la cocina.

Salió de los brazos de su novio y camino hacia el cachorro levantandolo en brazos.

—¡Hola papi! Jungkook me consiguió en la calle y pensó "oh a mi y a mi lindísimo novio nos haría bien tener un cachorrito" entonces me recogió y me trajo con ustedes para que me den mucho amor... —le dijo imitando la voz de un niño.

—Jungkook...

—Si dices que no, te juro, te juro Taehyung que no me tocas por un año —lo señaló con el dedo en señal de advertencia.

—Ni siquiera me estás dejando opción...

—No la hay, así que... ¿Si o si?

El mayor rodó los ojos y asintio.

Mientras Jungkook empezó a saltar saliendo de la cocina con emoción junto con el cachorro en sus brazos, gritando como loco.

—¡Ya se cómo te llamaras, tu nombre será Yeontan! Tan, ¿Te gusta? ¡Yeontan!

Taehyung rio mirando por dónde Jungkook se había ido con el cachorro.

—Yeontan... ni siquiera es tan feo, no puede ser malo, Tan... —sonrió.

De pronto la idea de tener un cachorro no parecía tan mala, es como si fueran una familia ahora

Una familia...

[...]

Llegamos al final 😔 qué les pareció? Les gustó? 😏 Ahora solo me quedan los 4 extras, y dejo la advertencia ahora.

Uno de los extras trata de un trio, si, entre Tae, jk y Jimin, en conclusión del VminKook. Y tendrán trkis trkis.

Si no te gusta la interacción de los tres en ese ambiente te pido que por favor no lo leas, así te evitas comentar cosas innecesarias y también evitas perder la 'magia' del amor entre Tae y jk. Un besote a todo/as 💖