Al día siguiente Taehyung no apareció en la universidad y Jungkook supo que su celo había iniciado.

No quiso preguntarle nada a SeokJin, pero a pesar de eso el castaño al llegar en la tarde al apartamento comento que Taehyung había entrado en celo esa mañana.

—¿Debió esperar mucho por Eliott? —pregunto preocupado, el rizado es un idiota que lo rechazo pero no quiere que su lobo  lo pase mal.

SeokJin le dio una mirada casi compasiva y negó

—Estaba con Eliott en la habitación, así que no —se encogió de hombros —se suponía que irían a las habitaciones que dispone la universidad, pero se quedaron allí... hay varios chicos en la casa que están enojados por ello.

—Como si nos importara que el idiota no fuera capaz de arrastrar al desinfectante a un cuarto alejado. ¿Podemos hablar de otra cosa? —dijo NamJoon cortando la conversación al ver a Jungkook afligido

—Bien... yo iré a dormir, los amo y no sean ruidosos —les dijo Jungkook levantándose del sillón riendo.

Ambos chicos se despidieron de él y continuaron viendo televisión mientras Jungkook sacaba su ropa y entraba en la cama torturándose con sus propios pensamientos.

[...]

El segundo día de celo, Jungkook sentía que su lobo estaba por morir de tristeza... desde que despertó, solo lo siente llorar.

NamJoon entro a su habitación y recién se dió cuenta que debería estar levantado y de camino a la universidad.

—Hola cariño —saludo el pelinegro —¿Irás a clases?

Jungkook no dijo nada, solo negó con un leve movimiento de cabeza.

—Bien... me quedaré contigo, podemos pedir comida chatarra y ver alguna seríe que te haya cautivado.

—No Nam... no es necesario

—Pero lo haré.

—No quiero que lo hagas —dijo sonriendo  —gracias por querer hacerlo... pero honestamente quiero estar solo.

NamJoon pareció pensarlo un momento y luego asintio.

—Bien, pero a la tarde traeré comida chatarra ¿Va?

—Gracias, te amo.

—Y yo te amo a ti.

Le lanzó un beso y salió de allí.

Cuando Jungkook estuvo solo en su cuarto, volvió a llorar.

Su lobo le pedía que llamara a Taehyung, que quizás si le daba alguna señal este le pediría que fuera con él. Y Jungkook se odiaba por ser un alfa tan ingenuo... finalmente se durmió.

Despertó un par de veces durante el día, cuando necesitó comer algo y bebió un vaso de leche, otra vez para ir al baño y luego cuando escucho a NamJoon con SeokJin entrar al apartamento.

Salió de allí con un pantalón deportivo,en cuanto los chicos lo vieron, supuso que debió tener una cara de la mierda por las expresiones afligidas de ambos.

—¿Siguen follando como conejos? —pregunto dirigiéndose a SeokJin, que lo miró sorprendido —D-digo, Taehyung... ¿Aún están encerrados allí?

—Es el segundo día Jungkook... siguen allí.

—¿Lo cuida bien? me refiero a si le ha llevado el agua suficiente y comida.

Sabe que es aún más idiota por hacer esas preguntas, pero no lo puede evitar... necesita saber que ese Omega lo cuida bien, no quiere imaginar que no lo alimenta o hidrata... es tan penoso preocuparse de esa forma por quién lo rechazó, pero necesita saberlo.

—Supongo que si... Tae es un alfa que marca a sus omegas en el celo, entonces cuando lo ha pasado en la casa ellos nunca salen de la habitación.

Y bien, su corazón termino de romperse.

—¡Jin! —se quejo NamJoon.

—Está bien, yo pregunté —dijo con una sonrisa mientras veía a su amigo mirar a SeokJin con cara de enojo —¿Trajiste comida chatarra? —cambio el tema.

—Si, traje hamburguesas.

—Genial —Jungkook le dijo fingiendo estar bien.

Comieron, rieron, y vieron una película. Pero cuando volvió a su cama, la tristeza volvió a aparecer.

[...]

El tercer día de celo, Jungkook siente que no puede aguantar más con esta tristeza.

Nuevamente no fue a la universidad, pero a eso de las tres de la tarde, decidió que no puede continuar así. De manera decidida saca la tarjeta del chico que conoció en Blondie y le escribe.

<¿Te parece vernos?

Soy Jaemin de Blondie.>

Y la respuesta fue inmediata.

<Puedo ir ahora mismo a tu apartamento si quieres. Recuerdo como llegar ;)>

Jungkook soltó una risa y mando un simple "te espero".

Marco rápidamente el número de NamJoon, que atendió enseguida.

—¡Namu! ¿Puedes no llegar temprano hoy?

—¿Sucedió algo?

—Viene a verme el chico fuego —NamJoon soltó una carcajada —vendra ahora... ¿Puedes llegar en la noche?

—¡Claro! Llegaré al apartamento como a las nueve o diez. Pásalo bien y cuídate, te amo.

—Te amo más.

Y corto la llamada.

Se levantó rápidamente y comenzó a ordenar, dejo todo decente y entro a la ducha. Cuando ya estuvo listo, arreglado y había sacado el maldito olor a tristeza que se carga, el timbre sonó.

Abrió la puerta con una sonrisa y el rubio lo saludo de igual forma.

En cuanto el chico entro, Jungkook cerro la puerta y lo acorraló para besarlo.

—¿Así de rápido? —pregunto sobre sus labios.

—Bueno, no te escribí para conversar.

El rubio soltó una carcajada y lo besó, llegaron a la habitación y Jungkook agradeció a qué su lobo no se quejara está vez.

Saco su camiseta y el rubio lo miro con deseo... y justamente eso es lo que necesita.

Los minutos pasaron y se encontraban follando, Jungkook estaba recostado y el rubio sobre él... era increíble en la cama, pero la mente de Jungkook solo viajaba hacía el rizado, cuando la tristeza quería volver a él decidió cerrar los ojos.

Su mente y su lobo jugandole una mala pasada lo hicieron pensar por un breve segundo en que ese cuerpo sobre él, que lo embiste con determinación dándole placer, no era Adam... si no su alfa.

—¿Puedo marcarte con mi aroma? —le pregunto Jungkook con la voz entrecortada mientras abrazaba al alfa rubio.

—Hazlo.

Y lo hizo, lo marco como si fuesen uno... como si ese alfa desconocido fuese su alfa de ojos verdes.

El rubio, en cuanto sintió la marca de aroma acelero las embestidas y se corrió, haciendo que Jungkook también lo hiciera.

El alfa rubio salió de él y dejo un beso en su  cuello.

—Me encanta tu aroma Jaemin y que me hayas marcado fue la maldita perfección.

Jungkook sonrió y asintió.

—Puedes ir a bañarte si quieres, así no se hace más fuerte.

—¿Que cosa?

—La mezcla de aromas.

—No me molesta, además a quien mierda le importara si huelo a un alfa.

Jungkook solo asintió sonriendo.

—¿Tienes algo que hacer esta noche? —pregunto el rubio.

—Nada ¿Por qué?

—¿Vamos a Blondie juntos? Podemos ir con tu amigo y su novio. ¿Que dices?

Jungkook lo miro sonriendo y asintió, porque él necesita despejarse lo más posible y si es llendo a Blondie con un alfa atractivo y sus amigos. Es malditamente perfecto

—Una pregunta primero —dijo Jungkook y el alfa asintio —¿Tienes algún omega?

—No —y soltó una leve risa —no he tenido un Omega jamás en mi vida... ¿Tú si tienes?

—No —nego riendo.

Saco su celular y le envío un mensaje a NamJoon, preguntando si quieren unirse a ese plan, quien tardo unos minutos en contestar, pero finalmente lo hizo diciendo que había convencido a SeokJin de ir.

Así que todo estaba planeado, en la noche irían a bailar.

[...]

Jungkook lo está pasando genial, bailan, ríen, beben y se besan toda la noche.

Cuando llegaron al apartamento, cada pareja se fue a su respectiva habitación y Jungkook por fin pudo follar sin pensar en Taehyung.

[...]

Al día siguiente, Jungkook despierta por el incesante sonido del timbre. Maldice a NamJoon por no levantarse a abrir la puerta, pero ayer su amigo bebió como si no hubiese un mañana, así que asume que la resaca lo tiene durmiendo profundamente.

Se pone su ya usual pantalón deportivo y va a abrir, en cuanto abre la puerta Taehyung ingresa de inmediato.

Sus ojos estan rojos, está despeinado y huele a Eliott.

—Lo siento —dice de inmediato, su voz está ronca y cierra los ojos un momento.

Jungkook no sabe que decir, no entiende que mierda le sucede a Taehyung pero no lo quiere tener allí con el aroma de su celo y de Eliott sobre él. Así que se ahorra las preguntas y habla.

—Podemos hablar luego o mañana, ahora hueles como la mierda.

Taehyung lo mira un segundo y se ve tan triste que Jungkook piensa que quizás ese Omega no lo cuido bien

—Tae... ve a tu casa.

—Lo siento por venir así, en cuanto desperté y está mierda se acabo vine. Perdón por el aroma, yo... me duchare enseguida —dijo caminando hacía el baño y Jungkook lo detuvo tomandolo del brazo.

—No Taehyung, ve a tu casa... podemos hablar y vernos mañana ¿Si?

Taehyung negó y sin previo aviso se acercó a él y lo abrazo.

—Márcame Kook —pidió con voz temblorosa —por favor... Necesito tu aroma en mi, márcame. —suplico escondiendo su rostro en el cuello de Jungkook.

Jungkook cerro los ojos, y dejo sus brazos abajo, está tentado a abrazarlo y marcarlo, pero no lo hará.

—No te voy a marcar Taehyung, no voy a hacerte sentir bien solo porque tú omega no pudo. Ahora ve a descansar y hablamos mañana.

Taehyung se alejo de él unos centímetros para poder hablar.

—Él no es mi Omega, y jamás lo será... yo estuve estos tres días aspirando el aroma a café de mi habitación, ni siquiera pude salir de allí porque mi lobo me estaba destrozando por sentir tu aroma —se acercó a él y dejó un beso suave en sus labios —por favor amor... dejame tomar una ducha y quedarme junto a ti.

Mierda.

Jungkook quiere, pero no es sano para ninguno. Mucho menos cuando otro alfa está durmiendo en su cama.

—Tae por favor —dice alejándolo de él —ve a la fraternidad, hablamos mañana.

—Por favor Kook —suplica con la voz temblorosa —te extrañe tanto, en cuanto recupere la consciencia por completo vine aquí, yo solo... te necesito.

Y Jungkook no sabe que hacer o decir, está sorprendido y su lobo está temeroso de que Taehyung descubra el aroma del otro alfa.

Ambos se están mirando, Taehyung lo mira con esperanza en la mirada y Jungkook lo mira confundido cuando se escucha la puerta de la habitación.

Ambos voltean rápidamente a mirar y se encuentran al alfa rubio mirándolos sorprendido y avergonzado.

—Lo siento, creí que era NamJoon... venía al baño.

Jungkook asiente o cree que lo hace porque en verdad se siente congelado, Adam ingresa al baño con una leve sonrisa de disculpas hacia ellos y Taehyung no despega su vista del lugar en donde estaba el rubio

—¿Quien es? —pregunta con la voz en un susurro, en una tonalidad casi inexistente y no voltea a mirar a Jungkook en ningún momento.

—No importa, debes ir a tu casa Taehyung.

Ese es el momento en que Taehyung lo mira y Jungkook puede ver el dolor en su mirada. Sus ojos están brillando y Jungkook teme que sean por lágrimas.

Quizás no debe sentirse mal por el alfa, pero lo hace.

—¿Estuviste con él? —pregunta con la voz temblorosa.

—Por favor Tae, ve a tu casa y hablamos mañana.

Taehyung niega mordiendo su labio inferior y camina decidido hacia la habitación del castaño.

Jungkook maldice internamente, pero no lo sigue ni le niega la entrada a su alcoba.

El rizado se detiene en la puerta y Jungkook puede ver como aprieta sus manos en sus costados, y en ese momento, el peor de todos, es cuando Adam sale del baño.

El rubio queda de pie mirando a Jungkook, pidiendo una señal o una explicación pero el ojiazul está en blanco. No sabe que hacer o decir.

Taehyung se voltea y se acerca a Adam, no lo toca ni le dice algo, pero se acerca lo suficiente para olerlo.

Lo hace y cierra los ojos haciéndose a un costado, Adam pasa junto a él y entra en la habitación cerrando la puerta, Jungkook supone que para vestirse y largarse de allí lo antes posible.

—Lo marcaste —dice una vez más con su voz temblorosa y camina hacía Jungkook, sus pasos son lentos pero decididos —Lamento haber venido sin avisar y... en estás condiciones, no debi hacerlo. Te veo mañana, perdón las molestias.

Y se va.

Jungkook se queda en su lugar, estático.

—No sabía que tenías pareja.

Escucha a Adam hablar saliendo de su habitación, ya está vestido y listo para irse.

Jungkook asiente, sin poder confirmar o negar esa afirmación.

—Lo mejor es que me vaya —dice el rubio.

—Si, es lo mejor.

Y Adam, al igual que Taehyung, pasa junto a él y se va.

Jungkook se quedó allí, parado en medio de su sala sin saber que hacer.

Todo fue muy rápido e impensado, cuando repasa la "visita" de Taehyung, no lo puede creer... ¿Él lo llamo amor? Esta tan malditamente confundido, que decide no pensar más en ello, va a la cocina a prepararse un té y cuando lo está bebiendo aún confundido por lo sucedido, recibe un mensaje y luego tres más.

<Sé lo que somos, disculpa mi comportamiento al verlo allí. No tengo derecho ni relevancia para actuar como actue al verlo.>

<No me interesa formalizar bajo ningún caso con Eliott. Avísame si puedo seguir viéndote ¿Si? Me gustaría hacerlo.>

<Puede ser hoy en la noche, mañana o cuando lo prefieras.>

<Te veo pronto...>